Más de 240 quioscos se han unido ya a la red comercial K-10, una plataforma nacida el año pasado que les permite desarrollar políticas comunes de información, comunicación y prestación de servicios y actividades. Los datos los ofreció anoche la directiva de la Asociación Profesional de Vendedores de Prensa de Valencia y Provincia en su asamblea general anual.

Como explicó la presidenta del colectivo que representa a más de 400 quioscos valencianos, Ana Isabel Valle, el objetivo de esta nueva red es mejorar la competitividad de los puntos de venta de prensa tradicionales, frente a las grandes cadenas de comercios, con servicios y productos exclusivos. "Se trata de hacernos fuertes en esta crisis, que a nosotros se nos ha agravado por el daño que hace internet, los periódicos gratuitos y el tabaco", explicó. La pertenencia al K-10 les da descuentos en seguros, fotocopiadoras o los portes de la distribuidora.

La presidenta de los quiosqueros valencianos insistió en la necesidad que tiene el gremio de reconvertir sus establecimientos en "tiendas multiservicios" con gran variedad de productos. Valle expresó la necesidad de sumar al negocio a la gente joven y "conseguir ayuda de la Administración, no en dinero, sino en servicios a través de los quioscos aprovechando su amplio horario".