La tradición de los contratos a dedo adjudicados por la Generalitat para obras menores se hereda de padres a hijos. Construcciones DV-Cuatro facturó 98.376 euros a la Conselleria de Sanidad en 2011, dos años después de saltar el escándalo de las concesiones otorgadas por Serafín Castellano desde Sanidad y Gobernación a dos empresas de su amigo José Miguel Pérez Taroncher por un importe superior a los 1,7 millones de euros. Construcciones DV-Cuatro, constituida en agosto de 2009 y domiciliada también en la Pobla de Vallbona, pertenece a un hijo y una hija del empresario que entre 2000 y 2008 concedió más de una veintena de trabajos a Construcciones Pérez Taroncher S. L. y Taroncher y Asociados S. L.

El último contrato con la familia ha sido revelado por el titular de Sanidad, Luis Rosado, en respuesta escrita al diputado de Esquerra Unida Lluís Torró, quien, con su compañero Ignacio Blanco, está llevando a cabo un barrido de las contrataciones de la Generalitat con las empresas hasta ocho del también compañero de jugar a pelota y de cacerías de Castellano. Según Rosado, la firma DV-Cuatro cobró por "pequeñas obras de reforma y adecuación" en dependencias sanitarias y por "equipamientos menores de mobiliario".

Sanidad ha sido el mejor cliente de la saga Taroncher, que ha recibido contratos a dedo (procedimiento negociado sin publicidad) e incluso en circunstancias absolutamente al margen de la ley. Así, en 2008 se le hizo un encargo clandestino de "reforma de la estructura del Pabellón General integrado en el Hospital la Fe". Un trabajo, sin soporte documental ni expediente alguno por el que facturó 498.025 euros cobrados gracias a que el entonces conseller Manuel Cervera no tuvo más remedio que convalidar una adjudicación hecha cometiendo una "infracción del ordenamiento jurídico" para que el empresario pudiera cobrar. La ilegalidad motivó incluso la apertura de un expediente por parte del gerente del Área de Salud 7 para depurar responsabilidades.

EU: "Que abran los cajones"

El vínculo de Castellano y Taroncher es tal que la esposa de éste, María Ángeles González, fue colocada de asesora del grupo popular de las Corts, donde ejerce como extensión del hoy secretario general del PPCV. Esta asesora y Nuria Fundamento Rioja casada en gananciales con Castellano escrituraron el 25 de abril de 2008 la compra de una finca de 25.000 metros a nombre de la mercantil l'Alqueria Vella S. C. P. por un precio declarado de 130.392 euros.

Blanco y Torró preguntaron por escrito en junio a todas las consellerias una a una por si habían tenido actividad con alguna de las ocho empresas del grupo Taroncher. Educación e Infraestructuras dieron la callada por respuesta. El resto, salvo la citada Sanidad, dijo que durante 2011 último ejercicio cerrado, no. Educación respondió luego en similares términos. EU ha formulado ahora la misma pregunta pero remontándose a 2000. "Si no hay nada que esconder no tendrán problemas en ejercer la transparencia que tanto predican y abrir los cajones", apuntó Blanco.