Los 90.000 euros recogidos hasta ahora en España por la impulsora del Proyecto Paula para destinarlos a investigar nuevos tratamientos contra la diabetes aunarán en Valencia las dos caras de la ciencia: la básica y la aplicada e incrementarán en uno más el número de investigadores que han podido ser contratados gracias a una iniciativa solidaria en solo dos años, que fue cuando nació el proyecto.

Desde que la impulsora, Cristina Ponce, arrancó con este imaginativo plan para fomentar el estudio de una nueva vía terapéutica contra la enfermedad de su hija adolescente, de quien tomó el nombre, se han contratado a dos personas en el Centro de Investigación Príncipe Felipe y ahora se contratará a una tercera que en unas semanas se sumará al equipo del Incliva.

El primer dinero fue al laboratorio del la doctora Deborah Burks, que contrató durante un año a una investigadora y a un técnico, que habían sido despedidos en el ERE del centro en 2011, para avanzar en un prometedor estudio que había quedado inconcluso. El tercer contratado del Proyecto Paula se integrará durante un año a la investigación que dirige la doctora Herminia González en el Instituto de Investigación Sanitaria Incliva que va a analizar si activando determinados genes se puede mejorar la funcionalidad de las células que segregan insulina.

Y aquí es donde las dos investigadoras intercambiarán sus resultados y conocimientos para avanzar en el mismo horizonte. De hecho, el trabajo en sus fases iniciales ya ha dado algunos resultados esperanzadores como acredita un reciente estudio de los doctores González y Andrés del CNIC que demuestra que el aumento de dichos genes mejora la diabetes en ratones.

Tanto Burks como González saben que sobre la diabetes hay un sinfín de interrogantes por esclarecer "Estamos tratando de encontrar respuesta, principalmente, a dos cuestiones: qué provoca la diabetes y cómo se desencadena para, una vez conocida la causa, curarla. Ese es el gran reto", declararon.

La mecenas afirmó que sigue recaudando dinero "como una loca" para ver si antes de fin de año ha reunido suficiente cantidad para contratar a un cuarto investigador. Ideas para lograrlo no le faltan.