La Consellería de Educación ha despedido a 29 profesores de Religión con contrato laboral indefinido y ha reducido las horas a la mitad a más de un centenar, según denunciaron ayer desde el sindicato USOCV. A estos damnificados hay que sumar otros 34 contratos rescindidos el pasado curso, lo que supone el 12 % de los 1.300 docentes de esta materia en las clases de Primaria y Secundaria de la Comunitat Valenciana.

Desde USOCV explicaron que el departamento que dirige María José Català ha modificado el modo de asignación de puestos y no les contabiliza las horas de patio y las tutorías, que sí se tienen en cuenta en otras asignaturas. Así, según denunciaron, con sólo las horas de docencia un profesor tiene muchas dificultades para completar una jornada y debe dar clases en varios colegios e institutos. "Más de la mitad de docentes de Religión tiene asignados más de dos centros", criticaron. Esta recomposición de horarios provoca que sobren plazas y se despida a los profesores.

Los titulares de Religión no tienen una oposición y trabajan para la Conselleria de Educación con contratos laborales indefinidos. También de manera interina. Según defendieron desde USO, la asignatura de Religión "es una materia opcional para los padres y alumnos que pueden elegir cada año en la formación académica y que la administración educativa está obligada a ofrecer".

El sindicato denunció que "las políticas de la Consellería de Educación dificultan la estabilidad de esta asignatura, con cambios continuos del destino de los docentes y de ajuste de hora a hora de la plantilla, como no se hace con ningún otro docente de las otras materias". Desde el sindicato USOCV recordaron que "la enseñanza de la asignatura de religión es mayoritaria en Primaria, puesto que es elegida por más del 62% de los alumnos de enseñanza pública".

USOCV censuró que, "una vez más, el curso ha comenzado y los profesores de religión todavía no conocen su destino definitivo en la mayoría de los casos" y que no se les trate como a los demás.