El presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, calificó ayer de «exorbitantes y falsos» los hechos irregulares que se han atribuido a la institución que preside, y reclamó «ser llamado de forma inmediata» por el juez para poder desmentirlos. Cabe recordar que EU hizo llegar al fiscal diez horas de grabaciones registradas durante años por Marcos Benavent, el que fuera gerente de Imelsa y considerado como centro de la presunta trama. Alfonso Rus es uno de los interlocutores en esas charlas grabadas. Benavent queda retratado como presunto conseguidor de contratos a cambio de comisiones.

Según el presidente de la Diputación, estas informaciones se han difundido con la «intención de generar perjuicios políticos injustos, tanto al comunicante como al partido político al que pertenece», en el momento «más idóneo para dañar la imagen, es decir, en plena precampaña electoral».

Por otro lado, el candidato del PSPV, Ximo Puig, pidió a Fabra que tome «medidas ya» con respecto al caso que afecta a Rus por las presuntas irregularidades en Imelsa. Por su parte, el candidato de EU, Ignacio Blanco, calificó de «insostenible» la situación de Rus, opinó que está «sentenciado políticamente» y el presidente del PPCV y Generalitat, Alberto Fabra, «debe retirarlo».