Los expertos de la Conselleria de Sanidad que valoran y deciden qué medicamentos de alto impacto terapéutico y coste económico pueden ser autorizados para los enfermos en situación límite han tenido que dar marcha atrás y autorizar el fármaco que le habían denegado a Antonio F. Marí, un enfermo oncológico de Gandia con un tumor en la cabeza que ingresó en el hospital Clínico el 4 de mayo con convulsiones y que no respondió a la quimioterapia.
Levante-EMV contaba hace una semana la angustia de Kati Vila, su mujer, y del paciente al conocer que no tenía derecho a recibir un tratamiento costoso, «después de haber pagado 43 años de Seguridad Social», resaltó el enfermo.
La publicación de su historia en este rotativo que posteriormente fue recogida en emisoras de radio y otros diarios, y la campaña de recogida de firmas a favor del fármaco obligó a la conselleria a cambiar la decisión inicial.
El primer gotero se lo pondrán mañana. «No sabemos si va a funcionar o no, hay un 25 % de posibilidades de que el tratamiento sea efectivo, pero si no lo recibe, nunca lo podríamos saber», agregó la esposa.
