La ola de calor que afecta a la Comunitat Valenciana dio ayer un respiro a los ciudadanos con descensos en las máximas que en Xàtiva, una de las áreas más castigadas por las altas temperaturas del martes, alcanzaron los 10,8 grados, pasando de un registro récord de 45,9 grados a una máxima de 35,1º mientras en las localidades costeras como Valencia la distancia entre las máximas de ambos días apenas representó cinco grados centígrados, con 30,4º frente a los 34,8º del martes.

El alivio térmico llegó finalmente ayer tras una jornada infernal en la que tres cuartos del territorio de la provincia de Valencia registró temperaturas máximas por encima de 40 grados, según información facilitada por la Agencia Estatal de Meteorología. Según estas fuentes, la primera semana de julio es la más cálida en Valencia desde 1869, solo superada por la de 1998 con una anomalía de +3,8 grados que se rebasó únicamente en 1994, año de infausto recuerdo por la oleada de incendios forestales.

Lo peor en muchas poblaciones fue la noche, con temperaturas anormalmente altas „en Valencia estuvo cinco grados por encima de lo normal„que se prolongaron hasta la madrugada si ceder apenas un grado.

La dorsal cálida anticiclónica apenas se ha movido de sitio y tras el alivio térmico de ayer y hoy volverá a traer temperaturas muy elevadas el viernes, cuando vuelven las alertas por riesgo alto„nivel naranja„ de altas temperaturas en las comarcas centrales y el interior de Valencia.