Un joven de 19 años fue detenido ayer en Silla acusado de un delito de desórdenes públicos por realizar un llamada al teléfono de emergencias 112 informando de una supuesta amenaza terrorista en el instituto en el que cursa un módulo de formación profesional.

Su «broma», como posteriormente lo calificó tras ser identificado, obligó a movilizar varias dotaciones de la Guardia Civil y de la Policía Local de Silla el pasado jueves. Además, aunque no hizo falta desalojar el centro, dado el nivel cuatro de alerta antiterrorista que hay activo en España este tipo de falsos avisos a lo único que contribuye es a dificultar la labora de investigación de amenazas reales.

Su «broma» podría acarrearle una pena de entre tres meses y año de prisión, según establece el artículo 561 del Código Penal. «Quien afirme falsamente o simule una situación de peligro para la comunidad o la producción de un siniestro a consecuencia del cual es necesario prestar auxilio a otro, y con ello provoque la movilización de los servicios de policía, asistencia o salvamento, será castigado con la pena de prisión de tres meses y un día a un año o multa de tres a dieciocho meses», detalla textualmente dicho artículo.

El falso aviso fue recibido en la sala del 112 el pasado día 19 de noviembre, apenas unos días después de los atentados de París. A las 17.00 horas se recibió una llamada telefónica en la que una persona sin identificar alertaba de la presencia de un terrorista yihadista en el instituto Enric Valor de Silla. El autor de la llamada colgó enseguida la comunicación y cuando las teleoperadoras trataron de ponerse en contacto nuevamente con él, éste no respondía.

A raíz de esta llamada y como medida preventiva se movilizaron varias patrullas de la Policía Local de Silla y de la Guardia Civil para determinar la credibilidad de la misma. Los agentes confirmaron que se trataba de un falso aviso sin llegar a ser necesario el desalojo de los alumnos.

Asimismo comenzaron a realizar gestiones para averiguar de dónde procedía la llamada e identificar al autor de la misma, quien habría incurrido en un delito de desórdenes públicos. La Policía Local de Silla averiguó que la citada llamada había sido efectuada desde el propio centro educativo y en el día de ayer procedió a la detención de un joven de 19 años como presunto autor de los hechos. El estudiante alegó que se trataba de una broma. Que podría salirle bien cara.