El segundo caso de enfermedad provocada por el virus del Zika en la Comunitat Valenciana es una mujer extranjera de 22 años, que reside desde el año 2011 en Alicante, y que estuvo en su país de origen, en Sudamérica, desde el 3 de diciembre hasta el 6 de enero pasado.
Según han informado fuentes de la Conselleria de Sanidad, a la joven, que no está embarazada, le fue diagnosticada la enfermedad el 26 de febrero, tras presentar artritis, fiebre y erupción cutánea de buena evolución, si bien ha sido un caso leve sin complicaciones y en estos momentos se encuentra en perfecto estado.
La Conselleria de Sanidad ya ha recibido la confirmación por parte del Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III de Madrid de que se trata de esta enfermedad.
El pasado 29 de febrero se confirmó el primer caso registrado en la Comunitat, un joven de 16 años, residente en la provincia de Alicante, que manifestó la enfermedad tras volver de un viaje a Colombia y que, según fuentes de la Conselleria de Sanidad, está totalmente recuperado.
El afectado permaneció en zonas de este país donde la enfermedad es endémica durante 45 días y a los dos días de su regreso, a mediados de febrero, acudió a un centro sanitario al notar los síntomas de la enfermedad.
Las manifestaciones clínicas de la patología fueron leves (ligeros dolores articulares, fiebre baja y erupción cutánea) y el paciente evolucionó favorablemente y se encuentra en buen estado y plenamente recuperado.
Ante la sospecha de que el origen de la enfermedad fuera el virus del Zika se remitieron muestras de sangre y orina del paciente al laboratorio de referencia estatal, el Centro Nacional de Microbiología, que el 29 de febrero confirmó el caso.
La Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública tiene desplegado un plan de control de la enfermedad producida por este virus basado en dos frentes.
Por una parte la vigilancia epidemiológica, que permite detectar posibles casos de personas afectadas (en principio, casos importados de países donde la enfermedad es endémica) y, por otra, la vigilancia y el control del vector, es decir de los mosquitos que pueden transmitir la enfermedad.
La red de profesionales de los centros de salud pública y la red asistencial han tomado medidas de refuerzo en la detección de casos y el sistema sanitario dispone de la información actualizada sobre la enfermedad, su diagnóstico y tratamiento han señalado las mismas fuentes.
Respecto al control de los vectores, las medidas de vigilancia son comunes a las establecidas para la enfermedad por el virus de chikungunya.
En ambos casos se trata de un vector capaz de transmitir la enfermedad: el Aedes albopictus (mosquito tigre) que se encuentra en litoral mediterráneo.
Las medidas de control se articulan en torno a 26 actividades específicas contempladas en el "Programa de vectores de relevancia en salud pública en la Comunitat Valenciana" puestas en marcha el pasado mes de septiembre.
