Cuatro años lleva Vicente Miquel Montagud esperando a cobrar 90.000 euros. Es la cantidad que, entiende, le debe la Diputación de Valencia tras haber ganado un concurso público en 2011 para gestionar el «stand» del Patronato de Turismo de la corporación provincial en disintas ferias, en concreto, en cuatro: Fitur y las Feria de Turismo de Barcelona, Bilbao y Valencia.
Sin embargo, esta última no se celebró, y por tanto, no la cobró. «La inversión se calculó en base a cuatro eventos, no a tres. No sólo no saqué ningún beneficio, si no que la firma no pudo hacer frente a los distintos pagos a proveedores y quebró», lamentó a Levante-EMV el empresario valenciano.
Su entidad Creta & Roi se hizo con el contrato en 2011 para ejecutarlo en 2012. Entre las actividades y «merchandising» que encargó para dotar de contenido el pabellón figuraban unos robots «moros y cristianos», que «llamaron la atención de medios de comunicación de toda España», afirmó Montagud.
Una «filà» de siete unidades «Neo», vestidos para la ocasión y desfilando al compás de la marcha «President» ante los ojos de los visitantes de Fitur. Montagud destinó 18.000 euros sin IVA para adquirir estos ejemplares. «También compramos iPads gigantes, camisetas, etc. Se hizo una gran inversión que no hemos podido recuperar», apunta el afectado.
La adjudicación se dio en época de Alfonso Rus como presidente de la corporación provincial y de Isidro Prieto como diputado de Turismo. «Por Fitur cobramos unos 200.000 euros, por la de Bilbao unos 60.000 y por la de Barcelona unos 70.000. De Valencia tendríamos que haber cobrado unos 90.000. De todo ello debíamos haber sacado un margen de beneficio de unos 35.000 euros», detalló Montagud.
Una cifra «ajustada» y «no muy elevada» teniendo en cuenta «el trabajo de creación y desarrollo que había detrás. En estas ferias es casi más importante darse a conocer que ganar dinero», añadió Montagud, que dice sentirse «abandonado» por los antiguos responsables del PP que dirigían la corporación provincial.
Vía judicial
Por su parte, el ente provincial reconoce que, efectivamente, el empresario realizó una inversión de la que se benefició la corporación y que después no le fue reconocida debidamente. Sin embargo, al tratarse de un pago tan atrasado y tras pedir diversos informes para conocer el estado de la situación, no ven la manera de abonar los 90.000 euros de forma debidamente justificada. Fuentes de la diputación informaron a este periódico de que se ha ordenado un pago de 12.000 euros en concepto de parte de esos gastos que tuvo Creta & Roi, los que se han podido acreditar.
Tras varias reclamaciones y reuniones durante estos últimos cuatro años, Montagud se plantea ahora demandar a la diputación, opción que el propio ente le ha trasladado al afectado como modo más efectivo para recuperar su dinero. «Me han dicho que del resto de la inversión no se pueden hacer cargo y que acuda a la vía judicial», indica el empresario.
«En el contrato estaba estipulado que si la feria no se celebraba, no se cobraba, pero nadie pensó que eso podía ocurrir. Además, la adjudicación era para los cuatro eventos e hicimos el gasto en consonancia», explica Montagud. «En el caso de no llevarse a cabo la feria, se estipulaba un lucro cesante del 6 % del total que debía haber cobrado, pero no he recibido nada», añade el empresario.
