El presidente de las Corts Valencianes, Enric Morera, reclamó ayer en su encuentro con el presidente del Senado, Pío García Escudero, que reforme su Reglamento y cree la figura del senador no adscrito, sin más prerrogativas políticas y económicas que las mínimas constitucionales, para que sea considerada así la exdirigente del PP Rita Barberá. Morera explicó ayer la propuesta al presidente del Senado en un encuentro entre ambos en la Cámara Alta. Asegura que la reforma se podría llevarse a cabo si la legislatura continua, si no se convocan nuevas elecciones, porque a su juicio Barberá contamina el Grupo Mixto en el que ahora está adscrita.

El presidente del legislativo valenciano asegura que ha visto receptividad en García-Escudero, aunque admite que este no es el mejor momento para plantear una reforma del Reglamento puesto que no se sabe si las Cortes se van a disolver dentro de 26 días. Cualquier propuesta en este sentido deberá ser apoyada por el PP, que tiene mayoría absoluta en la Cámara Alta. Morera sostiene que la exalcaldesa de Valencia representa a su juicio «un caso claro de transfuguismo», contra el que se firmó un pacto en 1998 que se le debería aplicar. La figura del no adscrito, que ya existe en las Corts Valencianes, permitiría a su juicio limitar la capacidad política y los ingresos de un senador que ha dejado la disciplina de su grupo parlamentario y que «sólo se representa a sí mismo», añadió.

En su opinión, esos parlamentarios deberían cobrar únicamente el sueldo base (2.813 euros mensuales) y las dietas (1.822 euros si son de fuera de Madrid y 869 si son de la capital) y tener muy reducida la iniciativa parlamentaria, sin poder ser en ningún caso portavoces. Ahora mismo, Barberá cuenta con este sueldo y con un complemento como viceportavoz en la Comisión de Suplicatorios en la que representa al Grupo Mixto (697,64 euros al mes).

A la espera del suplicatorio

El presidente del Senado, por su parte, asegura en un comunicado que le ha comentado a Morera que todavía no ha llegado ningún suplicatorio del Tribunal Supremo sobre Rita Barberá, pero a la que va a investigar por su supuesta relación con el caso Taula, el blanqueo de capitales por parte del PP en el Ayuntamiento de Valencia.