Hasta hace no muchos años era habitual en nuestro país la discriminación de los gitanos en distintos ámbitos sociales. Aunque se constituyó jurídicamente en 1982, la Fundación Secretariado Gitano comenzó a luchar contra esas actitudes en los años sesenta. Durante más de medio siglo ha logrado importantes avances en el empoderamiento y la integración de la comunidad gitana. Pero aún queda mucho por recorrer.

En ese camino, una de las prioridades de la fundación es la promoción educativa de la comunidad gitana en todos los niveles y en todas las edades. Con este objetivo se inició su intervención en el área de Educación en el barrio de la Coma, en Paterna, en 2008. Allí, con la colaboración de la Obra Social la Caixa, desarrolla un programa de orientación socioeducativa para el éxito escolar del alumnado gitano.

El plan de la fundación pretende facilitar la transición entre la Educación Primaria y la Educación Secundaria, con la pretensión de contribuir a la permanencia en el sistema educativo, así como la promoción de estudios posteriores. Todo ello dirigido a conseguir tasas más elevadas de éxito escolar en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO).

El proyecto desarrollado por la Fundación Secretariado Gitano se realiza desde una «perspectiva transversal, inclusiva y colaborativa», según explican desde la propia entidad. Así, cuentan con el propio alumnado, las familias y los centros educativos del barrio. «Todos ellos se implican en la construcción de alternativas, donde la participación, la organización y el diálogo constituyen elementos base de nuestro trabajo», aseguran.

Las líneas de intervención en las que trabaja la fundación abarcan desde el refuerzo educativo hasta los hábitos de estudio, los referentes positivos, el trabajo grupal con las familias y los centros educativos, la prevención del absentismo escolar o la educación en valores.

Además, todos los años la entidad celebra un encuentro autonómico de alumnos y sus familias donde participan también los niños y niñas de la Coma con sus padres. La idea es «promover la implicación de las familias en la educación de sus hijos e hijas y su apoyo en la promoción y permanencia de estos en los estudios y encuentren estrategias para afrontar las dificultades y mostrar una imagen positiva de la juventud gitana de cara a la eliminación de prejuicios y estereotipos».