Una delegación valenciana de políticos y organizaciones sociales visitará Colombia en los próximos días para verificar la situación de derechos humanos en el país tras los acuerdos de paz con la guerrilla de las FARC. La comitiva se integra en una comisión internacional de 40 personas de distintos países europeos y recorrerá la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, una población campesina que en sus 20 años de historia ha sufrido más de 300 asesinatos.

Mostrar el respaldo internacional a una comunidad campesina que ha sufrido más de 300 asesinatos y a las organizaciones defensoras de derechos humanos son los objetivos de la delegación valenciana, integrada por representantes de partidos políticos y sindicatos de la Coordinación Valenciana de Solidaridad con Colombia (CVSC), que visita Colombia a partir del jueves, 16 de marzo. Roberto Jaramillo (concejal de València en Comú), Isaura Navarro (diputada de Compromís), Marian Campello (diputada de Compromís), Cristina Cabedo (diputada de Podem), Javier Moya (CVSC) y Marco Antonio Llerena (Intersindical Valenciana y CVSC) forman parte de la Comisión Internacional en Defensa de los Derechos Humanos en Colombia, constituida por unas 40 personas de Bélgica, Italia, Alemania, Portugal y España, incluidos 14 cargos públicos de todo el arco parlamentario.

La comisión recorrerá durante tres días la Comunidad de Paz de San José de Apartadó (Antioquia, norte de Colombia) con motivo del 20 aniversario de su fundación. Hace dos décadas, la población campesina de esta zona se declaró comunidad de paz para expresar a todos los grupos armados que deseaban mantenerse al margen del conflicto, por lo que no iban a colaborar con ninguno de ellos ni a permitir su presencia en su territorio. Sin embargo, ni la Fuerza Pública (Ejército y Policía) ni paramilitares ni guerrilla han respetado este modelo de resistencia civil no violenta frente a la guerra: más de 300 integrantes de la comunidad fueron asesinados.

En enero de 2005, una comisión valenciana ya visitó la zona. Un mes después, Ejército y paramilitares asesinaron a 8 de sus miembros, entre ellos 3 menores y Luis Eduardo Guerra, fundador de la comunidad que se entrevistó con la comisión. Doce años después, la delegación valenciana quiere verificar cuál es la situación actual, que, según la población, ha empeorado a pesar de los acuerdos de paz con la guerrilla de las FARC y de que el Estado colombiano asegura que ya no existen paramilitares: continúan los crímenes y amenazas para que abandonen sus tierras o se sometan al dominio de los grupos armados que operan en la región. La importancia de estas visitas la expresa la propia Comunidad de Paz de San José de Apartadó: "La solidaridad internacional, que visibiliza nuestra lucha por nuestros derechos, es lo único que nos ha salvado del exterminio en estos 20 años".

La comisión internacional también tiene previsto reunirse con numerosos representantes de organizaciones sociales colombianas, del Congreso de la República, del cuerpo diplomático acreditado en Colombia, de ONG internacionales y de la comisión de paz de las FARC y del ELN. Además, ofrecerá una rueda de prensa para compartir sus conclusiones preliminares tras la visita.