El expresidente de la Generalitat Alberto Fabra ha repasado esta mañana en la comisión de investigación de los sobrecostes de la empresa pública Ciegsa en GeneralitatCiegsales Corts Valencianes

Ha recordado que él siempre quiso cerrar la empresa porque su gobierno no tenía ni para pagar lo básico. Ha repasado los recortes de aquellos años y ha insistido en que la única prioridad era reducir gastos porque la situación era de extrema necesidad. 'No había dinero, no podíamos pagar a nadie, teníamos una cola en el Palau de colectivos que querían cobrar' ha señalado varías veces y ha admitido que recortaron la administración por necesidad y también por ideología.

El también senador del PP Alberto Fabra eliminó 71 entes, incluido la televisión pública, lo que cifró en un ahorro de 3.250 millones. Ha insistido en que quiso cerrar Ciegsa y ha reprochado al actual Consell que aún siga abierta tras deslizar Podemos que el PP tenía intereses con las empresas que contrataba la empresa pública. Fabra defiende que si hubo sobrecostes siempre fue dentro de la ley y que esos añadidos a proyectos también se producen ahora y niega que conociera que existía una guerra entre campistas y zaplanistas que también se libraba en Ciegsa como por ejemplo admitió en su día otro de los comparecientes, Esteban González Pons.

El actual senador del PP ha subrayado después a preguntas de los periodistas que en ningún caso el grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Castelló contrató con Orange Market ni a ningún empresario para obligarle a pagar parte de su campaña electoral.

Así lo ha señalado a los medios de comunicación en los pasillos de Les Corts al ser preguntado por las acusaciones del ex secretario general del PPCV Ricardo Costa y las declaraciones del considerado número dos de la trama Gürtel, Pablo Crespo, sobre presunta financiación irregular en su campaña en 2007.

"Hemos estado escuchando muchas cosas de gente que son delincuentes porque ya están condenados. Yo puedo asegurar que en ningún caso por parte del grupo municipal en aquel momento hubo ninguna contratación (con Orange Market) ni con ningún empresario para obligarle a pagar parte de la campaña", ha remarcado y ha manifestado estar "absolutamente tranquilo".

Además, ha señalado que hay que "tener en cuenta quien hace esa denuncia": "una persona que es un preso, un delincuente", ha puntualizado en alusión a Crespo. "Nosotros no contratamos con nadie más allá de las limitaciones legales que teníamos y no obligamos a ningún empresario a pagar nada que le hiciera referencia a la campaña", ha reiterado.

Insistido por el hecho de que la empresa Piaf haya reconocido que pagaron a Orange Market para financiar al partido, el exjefe del Consell ha señalado: "Lo que ha dicho es que se pagó cosas, que Orange Market hacía la campaña regional y que él sería el que se ponía en contacto o alguien le diría que se pusiera en contacto con Orange Market para pagar algo, pero desde luego no fue ni a mi grupo municipal ni a mi persona".

"Por tanto, pido saber quién fue, que lo digan. Yo también tengo curiosidad y quiero saber quién obligó a Piaf a pagar algo que hacía referencia a una campaña autonómica en Castellón", ha manifestado.

Por otro lado y cuestionado sobre si pondría la mano en el fuego por alguien, después de que el pasado viernes tanto el expresidentes de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, como el de Castellón, Carlos Fabra, subrayaran que ponían "la mano en el fuego" por Francisco Camps, el senador del PP ha bromeado: "Cada uno que haga los compromisos que quiera. Yo pedí la mano una vez y me divorcié, con lo cual de manos no quiero saber nada".

Sobre las afirmaciones de Alfonso Rus de que sabía que estaba siendo investigado en el marco de la operación Taula, Fabra ha señalado desconocer esta cuestión ni quién pudo advertir al expresidente de la corporación provincial de Valencia. "En situaciones complejas había muchos comentarios, el señor Rus sabrá quién se lo pudo decir", ha zanjado.