La Real Academia de la Historia (RAH) reconoce que pidió al Ayuntamiento de Valencia una semblanza de la alcaldesa, Rita Barberá, para su Diccionario Biográfico Español. El retrato, como desveló Levante-EMV, lo ha acabado realizando una periodista que ejerce de asesora del grupo del Partido Popular en el consistorio, Elena Rodrigo. Este perfil atribuye a Barberá "la transformación económica, cultural y turística de Valencia".
Fuentes oficiales de la institución académica aseguran que no es un caso único, sino que se ha procedido de esta manera con otros políticos en activo, como algunas de las ministras del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, y con empresarios.
Sin embargo, no ha sido un mecanismo general. Hay biografías de políticos vivos que las firman historiadores, como las de Antoni Asunción o Vicente Albero. El argumento que esgrime la entidad que dirige Gonzalo Anes es la ausencia de historiadores dispuestos a realizar todas las biografías que se aprobó que debían formar parte del Diccionario. "Hay biografías que necesariamente tenían que ser así", aseveran.
La intención inicial, según señalan diversos académicos a este diario, era dar cabida en la obra sólo a personajes muertos. Pero posteriormente se decidió incluir a otros biografiados aún vivos: ministros y exministros, alcaldes y presidentes autonómicos, entre ellos.
La RAH, por otra parte, actualizará la ficha de Francisco Camps con los avances del caso Gürtel. Como publicó este diario, la reseña del presidente de la Generalitat publicada en el Diccionario Biográfico Español incluye la imputación por la citada causa, pero la da por archivada. La explicación oficial de la institución es que ésa era la situación del proceso cuando el volumen se envió a imprenta y que no existe "ninguna otra intención". Los acontecimientos posteriores se irán incluyendo "en el futuro", tanto en el caso de la entrada de Camps co?mo en las de otros personajes vivos.
El TSJ valenciano ordenó el archivo del caso de los trajes en agosto de 2009, pero el Supremo decidió en mayo de 2010 por unanimidad de la sala (cinco votos a favor y ninguno en contra) su reapertura. La biografía de Camps en la polémica obra no incluye esa segunda parte de la historia de Gürtel y se queda en la primera.
La actualización de datos ha funcionado mejor en otras entradas. Así, por ejemplo, la biografía del cardenal Agustín García-Gasco publicada en la misma obra -en otro volumen, eso sí, de los 22 editados hasta ahora- incluye la fecha de su muerte, que se produjo el 1 de mayo de este año, es decir, un año después de la resolución del Supremo sobre Gürtel y Camps, que no aparece.
Puertas cerradas a
los periodistas
Los periodistas que intentaron consultar ayer el "Diccionario Biográfico Español" en la Real Academia de la Historia (RAH) se encontraron con las puertas cerradas a la biblioteca. Se les exigía una acreditación o aval científico de que están realizando una investigación histórica para consultar los fondos. La decisión supone un giro en la política desarrollada desde que saltó el escándalo por la biografía de Franco incluida en la magna obra, realizada por el presidente de la Hermandad del Valle de los Caídos y que, entre otras cosas, elude calificar al personaje de dictador. Durante la semana pasada, los periodistas podían consultar con libertad total y sin acreditación alguna el "Diccionario". Según fuentes de la RAH, se trató de una situación excepcional ante la polémica, pero la entidad ha decidido regresar ahora a su "actividad normal", limitando el acceso sólo a los investigadores. Aconseja a periodistas y curiosos ir a la Biblioteca Nacional o comprar la obra (3.500 euros). a. g. valencia
