El patronato del Museo de Bellas Artes San Pío V acordó el pasado 29 de julio levantar el depósito de las 18 pinturas 16, según la directora que se encuentran en la iglesia de Nuestra Señora del Puig de Valencia. El objetivo era analizar su estado y restaurar las que lo pudieran necesitar. Al tiempo, el órgano rector del museo aprobó que se continuara con la revisión de las obras (255, en total) cedidas al monasterio del Puig, administrado por la orden de los mercedarios, como la iglesia citada.
La conselleria aseguró poco después que los cuadros saldrían del templo en el mes de septiembre. Sin embargo, iniciado el mes de noviembre, no se ha movido ni una pieza. Fuentes del departamento de Català alegan que es competencia del ministerio reclamar las obras.
Mientras tanto, UGT adornó ayer la denuncia sobre la gestión de Paz Olmos con nuevos hechos ocurridos en los últimos meses. Así, informó a la consellera de que una escultura de cerámica de Enric Mestre que estaba en el despacho del presidente de la Academia de San Carlos se rompió en junio «en multitud de trozos». Pese a que la obra consta en el inventario del museo, no se ha realizado expediente alguno ni se ha estudiado una posible restauración, dice FSP-UGT, que acusa de «oscurantismo» a la directora por «ocultar» este hecho.
Asimismo, revela que un boceto de Bardellino de la colección de Pere Maria Orts sufrió «un roto» por un codazo de un visitante en 2012, sin que se haya dado parte de la situación.
