La Real Academia de Bellas Artes de San Carlos quiere ser tenida en cuenta en la elaboración del plan museográfico del «nuevo» Museo San Pío V. Tiene uno hecho desde septiembre y no entiende „o, al menos, no sus principales responsables„ que la pinacoteca haya diseñado uno propio, el que presentó en febrero, y haya ignorado por completo el suyo. La presentación de los fundamentos de este trabajo dejó ayer al descubierto las tensiones existentes entre los mandos de la histórica institución y la dirección del museo.

No es una novedad. En el fondo subyace el difícil encaje en el funcionamiento de la pinacoteca de la entidad propietaria de buena parte de los fondos conservados en el San Pío V (hasta 14.000 obras).

«No queremos polémicas». «Estamos abiertos a un grupo de trabajo o a colaborar de manera paritaria». «El plan es una aportación de la Academia a la sociedad valenciana». Frente a estas frases, el tono general de la comparecencia „en el salón de actos del prpio museo„ del presidente de San Carlos, Manuel Muñoz Ibáñez, reflejó la fría relación existente con la dirección.

«No podemos ser tratados como si fuéramos solo un inquilino molesto», dijo el exdirector de Patrimonio Histórico de la Generalitat en la etapa de gobierno de Eduardo Zaplana. «La Real Academia no ha sido suficientemente tratada a la hora de buscar soluciones a los espacios. No sé por qué», añadió, aunque declinó calificar la situación como de marginación. «No vamos a regalar este proyecto para que no se lea y se tire a la papelera», señaló sobre el hecho de que el plan completo „de 90 folios„ no ha sido entregado al director del museo, José Ignacio Casar Pinazo.

Al respecto, precisó que se reunió con este el 15 de septiembre pasado „pocos días después de su nombramiento„ y le informó del documento de la Academia. También lo hizo en julio con la directora general de Cultura, Carmen Amoraga. Sin embargo, no ha ha habido interés por él, lamentó. Por ello, es «una obligación moral» de la entidad presentarlo.

No obstante, no mostró todo el contenido. Una de las razones es porque no todos los miembros de la Academia eran partidarios de airearlo. El asunto se debatió en el último pleno y la solución de consenso fue enseñar la filosofía, la hoja del proyecto. Este, a diferencia del del museo, aboga por integrar el arte valenciano en un recorrido internacional.

La dirección del San Pío manifestó ayer su disposición a debatir todas las propuestas. Al tiempo, calificó la de la Academia de «continuista» con respecto al discurso expositivo actual y recordó que el plan ha sido «reclamado insistentemente» por el ministerio al museo desde 2005, sin que se haya abordado hasta ahora, con el nuevo Ejecutivo.