El extraño desfallecimiento que sufrió Nico Terol en la carrera de Indianápolis se ha quedado, de momento, en un episodio aislado. El alcoyano se bajó de la moto el pasado domingo con fuertes dolores estomacales que le hicieron perder un buen número de posiciones en carrera cuando parecía en disposición de pelear por el podio. Terol se sometió el miércoles a pruebas médicas para determinar el origen, pero éstas descartaron algún tipo de dolencia. «Ha salido todo bien a falta de los resultados de las analíticas que los tendremos la semana que viene», explicó su mánager, Xavi Pérez, a este periódico. Así pues, el valenciano podrá correr sin problemas este fin de semana en Brno, otro de los trazados que se le dan muy bien y donde ya venció en 2010. j. bartual valencia