Las ofertas de la compañía británica con capital árabe y la de una empresa de Estados Unidos, superan la realizada por el magnate de Singapur Peter Lim, que postula el presidente Amadeo Salvo, para comprar el Valencia CF. Bankia cerró ayer la primera fase del proceso de venta del club de Mestalla, donde confirmó que se han presentado varios inversores, aunque sin detallar ni el número, ni el nombre de ellos. La propuesta de la empresa de Londres, tal como informó Levante-EMV, parte entre las favoritas, así como una compañía de Estados Unidos, pero las rigurosas normas de confidencialidad del banco impiden averiguar quien está detrás de cada oferta. Sin embargo, según ha podido saber este periódico las dos propuestas presentan una quita inferior a la de Lim.

De momento, lo único que se sabe con certeza es que Bankia recibió ayer en su sede central, en Madrid, varias ofertas, todas ajustadas a las condiciones planteadas por KPMG, asesor de Bankia. Lo que significa que la venta del Valencia está, definitivamente, encarrilada. Hay inversores reales interesados en adquirir en propiedad el club de Mestalla, una afirmación que hace unos mese costaba realmente de creer. Entonces, nadie imaginaba que se abriría una puja firme y serie para competir por la mayoría accionarial del Valencia (70,4 por ciento), en manos de la Fundación desde la ampliación de capital de 2009. Ahora se abre un periodo para hacer un análisis que permita seleccionar las mejores e iniciar un proceso de recepción de ofertas vinculantes. El tiempo de duración de este proceso dependerá de la información que soliciten los inversores y de la disponibilidad de estos datos. Se habla de un desarrollo relativamente corto. Algunos se atreven a decir que en el plazo de un mes, como máximo, se habrá hecho oficial la elección.

El banco no ha desvelado, por tanto, ni el número ni los nombres de los inversores. Fuentes de la entidad explicaron ayer que, para la buena marcha de este proceso, es necesario que, como sucede habitualmente en estas operaciones, se desarrolle bajo los términos de confidencialidad que normalmente piden los inversores.

Esta confidencialidad, remarcaron estas fuentes, es «imprescindible» para que la operación llegue a buen término y se pueda cerrar en el menor plazo posible con el mejor proyecto «deportivo, social y económico» para el Valencia CF.

Por todos estos motivos, desde Bankia explicaron que no se pueden ofrecer detalles ni del número de ofertantes ni el nombre de ninguno de ellos, con el fin de permitir el correcto desarrollo de la operación. Todas las desinversiones desarrolladas por Bankia se ejecutan «bajo criterios de concurrencia, transparencia e igualdad para todos los inversores». Habrá, por tanto, que esperar algunas semanas para conocer quién es el nuevo dueño del Valencia y cuál es su procedencia. La asiática queda más lejos.

Ofertas en firme y sin cambios posteriores

Superada esta primera fase de presentación de ofertas no vinculantes, las que han obtenido el pasaporte a la segunda ya podrán tener acceso a documentación exhaustiva del Valencia CF: las cuentas, la auditoría realizada por KPMG e incluso una visita al club y a los estadios. Así se refleja en el documento que KPMG pasó a los potenciales inversores con catorce requisitos muy técnicos, y que en teoría los escogidos han cumplido. Ahora deberán presentar una oferta final, en firme, y que no esté sujeta a cambios posteriores en materia de financiación.