«La última carrera de Bernat será tal y como él habría deseado. A todo gas». Rafa Carboneras es el presidente del MotoClub de Alberic, localidad en la que la pasión por el motor es casi una religión: «No conozco una sola casa en el pueblo en la que no haya al menos una moto. Aunque sea una Scooter», describe el portavoz de un colectivo que se prepara para darle a Bernat Martínez, su querido amigo y vecino, un último adiós a la altura de las grandes figuras del motociclismo.
Una vez se sepa cuando será repatriado el cuerpo de Martínez y la fecha del funeral, se acelerará un tributo ya muy avanzado en detalles. La idea es la de formar un cortejo fúnebre que acompañe al piloto fallecido «en su última carrera», apunta Carboneras. «Queremos formar un cortejo que vaya primero desde el tanatorio hasta la Iglesia, donde queremos hacerle un pasillo, que más tarde repetiremos de camino al cementerio», añade. Tal como relata Carboneras a Levante-EMV, la familia de Bernat ya ha sido informada de la propuesta y ha dado su consentimiento. De hecho, la iniciativa ha emocionado a sus más allegados, todavía consternados por la tragedia y que mantienen una fuerte vinculación con el motociclismo popular. Cabe recordar que el padre de Martínez, mecánico de profesión, fue uno de los fundadores del MotoClub de la localidad de la Ribera. Una afición que se transmitió a toda la familia. A sus hijos, Bernat y Álex, como también a su sobrino Vicent, mecánico en las filas del equipo de Valentino Rossi.
De este modo, es segura la presencia mayoritaria en el homenaje de los socios del MotoClub, con más de 130 afiliados de los cuales un total de 25 tienen licencia federativa. A ellos se sumarán, además de los habitantes, a título individual, de una población que conocía muy de cerca a Bernat, los integrantes de otros colectivos motociclistas que han llamado a Carboneras para interesarse por los detalles del homenaje: «Ya nos han llamado de casi todas las peñas de la comarca y también de otros clubes de la provincia de Alicante y de Castelló. En muchos de esos pueblos conocían a Bernat, que era un habitual en la mayoría de carreras urbanas populares». Desde el MotoClub se han encargado también 300 pegatinas con el número 76, en honor al dorsal del que no se separó nunca Bernat: «Estamos convencidos de que va a venir tanta gente que parecerá un Gran Premio», vaticina Carboneras.
Otro tributo en diciembre
No será el único homenaje póstumo que reciba Bernat. Además, en el primer domingo de diciembre tendrá lugar la Exhibició de Motos Clàssiques de Alberic, que en su cuarta edición estará dedicada a la memoria del piloto desaparecido. Una convocatoria que tradicionalmente tiene una gran respuesta popular y que, como es habitual, será gratuita para todo el público.
