Tras el triunfo del pasado domingo en la cancha del Obradoiro, el Valencia Basket confirmó una jornada más su segunda plaza en la clasificación y también el hecho de poder jugar el «play off» por décima temporada consecutiva y a falta de todavía nueve jornadas para llegar al final de la fase regular de la Liga Endesa.

En una campaña donde la aventura europea terminó demasiado pronto y tras las decepción copera, el conjunto «taronja» tiene en su mano el ambicioso reto de ser campeón de la fase regular, hecho que nunca ha conseguido en su historia. La ecuación simple marca que ganando todo lo que queda en el calendario, el Valencia Basket será primero.

El dato de la justicia dice que el conjunto valenciano ha sido el equipo que más veces ha ocupado esta temporada la primera plaza, compartida o en solitario, con un total de veintitrés jornadas. La realidad actual indica que el equipo valenciano parte con un partido de desventaja frente al actual líder, el Barcelona. El conjunto blaugrana debe todavía rendir visita a la Fonteta, donde un triunfo de los de Pedro Martínez devolvería el primer puesto tras la victoria en la primera vuelta en cancha catalana. En esta puja no hay que perder de vista al Real Madrid. El conjunto de Pablo Laso, con la Euroliga muy comprometida, ya que no depende de sí mismo, va a centrar todos sus esfuerzos en la competición doméstica lo que aventura una lucha enconada en las próxima semanas. Un dato positivo ante el conjunto blanco es que, en caso de quedar igualados en la tabla, el «basket average» favorecería a los valencianos.

Cinco desplazamientos

El Valencia Basket, de las nueve jornadas restantes, va a tener que afrontar cuatro partidos en casa y cinco como visitante. Curiosamente, esta campaña el conjunto «taronja» ha perdido hasta el momento más partidos en casa (Real Madrid y Estudiantes) que fuera (Laboral Kutxa). El duelo directo será el de la 31ª jornada, donde los de Pedro Martínez recibirán el Barcelona en la Fonteta. Las salidas más complejas a priori serán las de Gran Canaria, en dos jornadas, y la de Málaga, en la penúltima entrega de la Liga Regular. El Barcelona, por su parte, jugará cinco encuentros en el Palau Blaugrana y cuatro fuera de su cancha.

Sus citas más complejas serán la salida a la cancha del Fuenlabrada, enfrascado en la lucha por entrar en el «play off», y los dos encuentros en casa ante el Laboral Kutxa, descolgado tras sus dos últimas derrotas, y el Real Madrid. Un triunfo azulgrana podría descartar a los madridistas de la pelea, pero una derrota, metería de lleno al Real Madrid en la puja por alcanzar una posición que nunca ha gozado hasta el momento en la temporada.

Precisamente, el conjunto de Laso afronta cinco jornadas en casa y cuatro como visitante. Al margen de su visita al Palau, tendrá otra complicada esta próxima semana en Murcia y luego en Málaga. En la penúltima, recibirá al Laboral Kutxa de Perasovic.