La polémica derrota del Villarreal en El Molinón, que supuso la salvación del Sporting y el descenso del Getafe, va ganando peso con el paso de las horas y de los días. El primero en criticar el supuesto juego pasivo del conjunto del Madrigal fue el entrenador del Getafe, Juan Eduardo Esnáider: «Marcelino estará contento por la permanencia del Sporting», dijo después de la derrota de su equipo en el campo del Betis (2-1) y de la victoria de los asturianos ante el Villarreal (2-0) en El Molinón.

Hasta ahora el técnico del Submarino Amarillo se ha mantenido al margen de cualquier polémica. Pero su mujer, Mar García Tuero, le metió en un lío con un mensaje de Facebook que ayer corrió como la pólvora. «Me voy de Asturias con el trabajo hecho. Os dejamos en Primera», escribió la esposa del técnico después de que el Villarreal perdiese ante el Sporting.

El conjunto que entrena Abelardo estaba obligado a ganar al conjunto castelloense en la última jornada. Marcelino, asturiano y extécnico del equipo de Gijón, había asegurado durante la previa su deseo de que sus paisanos siguieran en Primera. Este comentario no gustó en absoluto ni al Getafe ni al Rayo, los otros dos rivales por la permanencia.

El Villarreal, con la clasificación para la previa de la Liga de Campeones de la próxima temporada ya asegurada, jugó en El Molinón con una alineación plagada de suplentes, lo que provocó más la rabia de la gente del Getafe. Eso sí, el equipo madrileño dependía de sí mismo.

Esnáider, que sustituyó el pasado abril en el banquillo a Frán Escribá, aseguró en la sala de prensa del estadio Benito Villamarín que «no es fácil jugar este tipo encuentros». «En el descanso traté de calmar la ansiedad», afirmó el exdelantero.