El 18 de junio de 1863 este periódico anunciaba un duelo en el trinquet de Alacant entre tres jugadores de la capital valenciana contra cuatro de Alacant: «El pacto será a dos cotos, uno a rebote y otro a escalera izquierda». Como en tantas noticias de la época no se citaba el nombre de los pelotaris pero el hecho de publicarlo en el diario hace suponer que se trataba de un acontecimiento de primer orden.
En todo caso nos confirma que a mediados del siglo XIX ya existía un trinquet en Alacant, seguramente el mismo que acabó en los años cuarenta del pasado siglo en manos de Manuel Segarra, propietario de la fábrica de calzados de La Vall d´ Uixó y dueño en aquellos tiempos del Trinquet de Pelayo. A principios de los años cincuenta el trinquet pasó a ser cine de verano. Por él habían desfilado las grandes figuras desde el Nel, a Quart, Juliet o Rovellet.
La pilota en Alacant, que tuvo trinquet en el siglo XVI y que en el XIX llegó a disponer de tres recintos para su práctica, además del juego en las calles, acabó refugiándose en el frontón del Club Montemar. En la capital alicantina el Joc de Pilota era cosa del pasado. Hasta que ha llegado un grupo de aficionados liderados por Lluis Soler, para,acompañado de Julio Mas, hijo del último gerente del trinquet, remover cimientos, mantener reuniones y proyectar un futuro que pasa por la habilitación de un trinquet. Puede ser adaptando el frontón de 54 metros del club Montemar.
Han hablado con el ayuntamiento; tienen programadas visitas a centros escolares para fomentar una escuela. La Federació les ha prometido la organización de una gran partida para el 9 d´ octubre con primeras figuras de la comarca.
Lluis, natural de Sella, muestra su ilusión por la noticia: «Los responsables municipales, como Nacho Vellido, nos han prometido trabajar por recuperar esta tradición pero previamente se ha de hacer un trabajo de base, de captación de voluntades. Vamos a demostrar que en Alacant hay afición y ganas de disponer de un recinto».
Ya está elaborado el proyecto arquitéctonico de rehabilitación del frontón del club Montemar; ya está el compromiso de algunos clubes de la comarca de colaborar con la causa y el de la Federació de Pilota. Hay ideas y voluntades conjuntas, cimientos necesarios para ver cumplido el sueño de recuperar una entrañable tradició en la capital alicantina.
