El Mestalla dio ayer un paso atrás en sus aspiraciones de jugar la promoción de ascenso a Segunda división, hito que no se logra desde hace quince temporadas con César Ferrando en el banquillo del filial, y ayer cayó ante el Mallorca B por 1-0.
El Mestalla aterrizaba en Mallorca tras conseguir una clara victoria la semana anterior contra el Atlético Baleares, pero no pudo repetir resultado contra el filial del Mallorca. El partido empezó con el Mestalla dominando y teniendo las mejores ocasiones. Primero Eugeni a pase de Vidal y luego el propio Nacho Vidal desde fuera del área, ponían a prueba los reflejos de Valens.
Con el paso de los minutos, el Mallorca B fue entrando mucho mejor en el partido y así fue cómo en el minuto 15 tuvo la mejor ocasión del encuentro, en un mano a mano entre Caye y Sivera, que salvo providencialmente el portero de Xàbia.
Poco más reseñable de la primera parte además de otra buena parada de Sivera a Cedric tras un saque de esquina, y de un lanzamiento lejano de Rafa Mir que a punto estuvo de colarse tras controlar mal el portero Valens. Con el empate a cero se llegaba al descanso.
La salida del vestuario tuvo el mismo guion que el inicio del partido, con el Mestalla protagonista y el Mallorca acumulando muchos hombres por detrás de la pelota.
Aridai, desde fuera del área, lo intentó, pero el portero local no se dejó sorprender. Los cambios del Mallorca B le dieron otro aire a los locales, y con Baba y James en el campo tuvieron más presencia ofensiva. Así fue cómo una incursión de James por banda izquierda acababa en penalti cometido por Nacho Vidal a favor de los baleares. Cortés lo lanzó al palo.
Golazo de vaselina de Caye
Ya en el 85, cuando parecía que el partido iba a acabar en tablas, llegó el gol de Caye. Un golazo. Un balón suelto sin peligro alguno no lo logra despejar Zotko, que mide mal, y le queda al delantero local franco para batir de vaselina a Sivera.El tanto fue muy aplaudido por los aficionados locales debido a su bella factura.
Los últimos minutos fueron trabados, y los locales consiguieron que no se jugara a nada, más aún después de la expulsión por roja directa de Aridai. Pero aun así Fran Navarro forzó una falta en la frontal que Cifu estrelló contra el larguero en el último suspiro del partido. Un gol que hubiera supuesto un empate, que visto los méritos de unos y otros tras los noventa minutos, quizás hubiera sido más justo.
