El informe de la Intervención Delegada sobre la situación económica de la conselleria de Agricultura durante el primer semetre de 2015 „es decir, a lo largo del período de mandato de la legislatura gobernada por el expresidente Alberto Fabra (PP)„ revela un escaso grado de ejecución presupuestaria respecto a los 142,9 millones de gastos comprometidos por la administración autonómica que entonces gobernada José Císcar.
Según constata el citado estudio de auditoría interna, esta conselleria tan sólo ha ejecutado hasta junio el 24,25 % del presupuesto para los diferentes programas de inversiones y ayudas para mejorar la producción agraria y ganadera.
Tanto es así que la mayor parte de los principales sectores agrarios y ganaderos todavía no han recibido ninguna ayuda correspondiente a 2015, año en el que siguen sin convocarse las principales órdenes de subvenciones para el campo y que afectan, entre otros, a la promoción de los cultivos protegidos por los 16 consejos reguladores de las Denominaciones de Origen (donde están representados los cítricos, caquis o los vinos de la Comunitat Valenciana). Dadas las fechas, ya es prácticamente imposible que cobren estas ayudas.
En el caso las partidas de investigación, la conselleria ejecutó el 29 % del gasto hasta el 1 de julio, que corresponde sobre todo a las partidas asignadas para el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA). Resulta significativo el 21 % de ejecución del programa de Fomento y Garantía Agraria.
Además, debido a la paralización del programa operativo de pesca del Gobierno central, todavía no se han aprobado los fondos correspondientes al sector pesquero. Respecto al presupuesto total de la conselleria agraria „ 274,3 millones para 2015„ Císcar tan sólo se comprometió a gastar un 62,5 % de esa cantidad.
