O Coepa promueve una regeneración en sus filas o será el Consell quien mueva ficha para conseguirlo. Eso es que piensan en el Gobierno valenciano „y ahí no hay fisuras entre el PSOE y Compromís„ y eso es poco más o menos lo que vino a defender ayer en Alicante el conseller de Economía, Rafa Climent. Coincidiendo con la reunión de la junta directiva de la patronal en IFA, el exalcalde de Muro asistía en el centro de Alicante al pleno de la Cámara de Comercio. Fue en este contexto en el que dejó clara su postura: «Vamos a ver qué pasa con el IVF y con Coepa y, llegado el momento, si tenemos que tomar medidas, las tomaremos y hablaremos con quién tengamos que hablar», sentenció el conseller, quien no ocultó que, hoy por hoy, la única salida para Coepa pasa por un cambio de interlocutores. Evidentemente, ese alicantinismo exacerbado del presidente de Coepa, Moisés Jiménez, no ha gustado para nada en Valencia, y sólo ha servido para acabar quemándolo más si cabe de cara al Gobierno valenciano. Tanto es así que al conseller de Economía no le tembló la voz a la hora de hacer una advertencia muy clara: «Lo primero que tiene que hacer Coepa es asumir responsabilidades». No fue su único aviso: «Vamos a exigir que haya interlocutores válidos y que generen esa confianza que necesita todo el ámbito empresarial». Ahora bien, todo eso lo dijo poniendo el acento en que «nadie del Gobierno valenciano va contra la provincia de Alicante. Si algo está haciendo este Gobierno es vertebrar el territorio y dignificar esta provincia».

A última hora de la tarde, la junta directiva de la patronal alicantina optó de forma unánime por la continuidad de su presidente y creó un grupo de trabajo para negociar con el Consell la devolución del crédito de 3,9 millones por el Centro de Oficios