Clínica Baviera, fundada en Valencia en 1992 por los hermanos Julio y Eduardo Baviera y otros dos médicos, perderá en breve el control en manos de inversores locales. Socios de referencia del grupo oftalmológico líder en España en su sector y que aglutinan alrededor del 40 % del capital social de la compañía -cuyo valor en bolsa se situaba ayer en casi 63 millones- han dado un mandato a Rothschild para evaluar posibles compradores de sus inversiones en este negocio. Se trata de Corporación Financiera Alba (en manos de la familia March), propietario del 20 % de los títulos de Clínica Baviera; así como de Grupo Zriser (en manos de Pablo Serratosa, titular del 10 % de la firma médica valenciana) y de Netsa (de los Mora-Figueroa), que posee otro 10 % de la firma de salud.

Mientras la familia Baviera sostiene que no ha tomado ninguna decisión sobre posibles ventas, según informó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la decisión de los March, Serratosa y Mora Figueroa para «evaluar posibles opciones estratégicas e implementar un proceso de reconfiguración de la estructura accionarial de la sociedad» podría arrastrar definitivamente a la saga valenciana. La familia de Eduardo Baviera Sabater, presidente de la compañía ahora con sede en Madrid, posee un 30 % de la mercantil. Alrededor de un tercio de las acciones están en Bolsa.

«El proceso sigue su curso sin que haya constancia para la sociedad de que el proceso se haya cerrado y, si se produjeran avances significativos, la sociedad informaría al mercado mediante la publicación de la correspondiente comunicación de información relevante», explica la dirección de Clínica Baviera a la CNMV. Tras la subida de ayer, los títulos de Clínica Baviera se han situado en los 9,60 euros y su capitalización bursátil ha ascendido a 156,7 millones. En lo que va de año, Baviera ha logrado casi duplicar su valor, subiendo cerca de un 90% en 2016.

El gigante asiático Aier Eye Hospital Group ha contratado a Uría Menéndez para preparar una posible opa sobre Clínica Baviera, ya que el inversor chino superaría el 30 % de la propiedad, lo que le obliga a comunicar una oferta pública de adquisición.

Los principales socios de la compañía son Julio Baviera Sabater (14,755 %), Eduardo Baviera Sabater (5,187 %) y Fernando Llovet (9,29 %), según los datos registrados en la CNMV. Tras la suspensión de la cotización en bolsa a primera hora de ayer, el consejo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores levantó a las 11.45 horas la suspensión cautelar adoptada en la apertura de la negociación de Clínica Baviera tras haber puesto a disposición del público información suficiente de las circunstancias que aconsejaron la adopción del acuerdo de suspensión.

Los hermanos Julio y Eduardo Baviera Sabater han informado de que no han otorgado ningún mandato de venta de sus participaciones y que, «llegado al caso», la incorporación al proceso iniciado por los citados accionistas dependerá de la evolución del mismo.

Clínica Baviera logró una beneficio neto de 6,1 millones en el tercer trimestre de 2016, un 162% más que en idéntico período de tiempo del año anterior. La firma cotizada en el Mercado Continuo facturó 67 millones, y las clínicas del norte de Europa registraron un crecimiento del 12%. La empresa destaca el crecimiento del «Ebitda» en España (+19%) y en el negocio internacional (+15%).

Expansión en Europa

La actual red de clínicas de la compañía cuenta con 74 centros, 50 de los cuales se encuentran en España, 19 en Alemania, 4 en Italia y 1 en Austria, con más de 850 profesionales al servicio de los pacientes. En Algemesí ha abierto una nueva clínica que se incorpora a la cartera del grupo, a la que se sumarán nuevas aperturas en los próximos meses. El grupo salió a Bolsa en 2007, en pleno boom y en vísperas del estallido de la burbuja inmobiliaria en España.

El anuncio de venta de una parte de Clínica Baviera se conoce poco tiempo después del realizado por los Lladró para vender la Ciudad de la Porcelana al fondo de de inversión PHI Industrial Acquisitions.