Jordi Cuenca, Valencia

El mercado inmobiliario, en el que Bancaja está plenamente inmersa como prestamista y agente promotor y constructor, fue el año pasado -y continuará siéndolo en 2006- el principal factor de crecimiento del grupo, cuyo volumen de negocio alcanzó en 2005 los 109.873 millones de euros, con un incremento del 35,6% respecto al ejercicio precedente. Las inversiones crediticias se situaron en 49.483 millones, es decir, un 36,2% más tras aumentar en 13.149 millones. De esta última cifra, 8.593 millones, con una subida del 51,33%, correspondieron a los préstamos hipotecarios, cuyo peso sobre el total de la inversión crediticia bruta es ya del 65,59%.

El director general de la entidad de ahorros, Fernando García Checa, explicó ayer en la presentación de resultados del grupo que Bancaja prevé que más de la mitad de su volumen de negocio provenga este año del sector inmobiliario. Checa añadió que la captación de clientes la está consumando la entidad a través del mercado de la vivienda y de ahí los crecimientos que está experimentando en sus nuevas áreas de penetración. La caja ha culminado ya el programa de expansión contemplado en el plan estratégico con la apertura de 95 oficinas en 2005, y este año prevé abrir sólo 15 más (hasta 1.050), la mayoría en la Comunidad. La red de sucursales ubicadas fuera de la autonomía aportó en 2005 más del 34% del volumen de negocio, con un incremento del 43,8%. No menos significativa fue la contribución de los inmigrantes. Este colectivo supone ya el 9% del total de la clientela de la caja y representa el 29% de los nuevos usuarios. El crecimiento del negocio de extranjero fue del 50%. El presidente de Bancaja, José Luis Olivas, calificó el año pasado como «excepcional» para la entidad, que incrementó sus resultados netos en un 17,3% al llegar a los 332,1 millones. De esta cantidad, un 30% lo aportaron las filiales, como el Banco de Valencia. El grupo inmobiliario contribuyó con un 13,6% y las participadas, con 23,8 millones (un 7,1%). Olivas hizo hincapié en la saneada situación en que se halla la caja, que ha reducido del 0,54% al 0,53% el ratio de morosidad, con una cobertura del 374% -frente al 389,9% de 2004- y unos recursos propios de 5.187 millones (1.533 por encima del mínimo necesario), que son fruto de la política de prudencia en sus dotaciones, especialmente dado su alto volumen de créditos con garantía hipotecaria.

Gran liquidez e inversión

En relación con la gran liquidez de que dispone la caja y la posibilidad de que destine parte de ese dinero a incrementar su cartera industrial, José Luis Olivas afirmó que Bancaja no tiene ninguna previsión de inversión, pero que, si surge una oportunidad, la estudiará. Sí dejó claro que Cartera de Participaciones Empresariales, la corporación de la que es propietaria junto a la CAM, va a centrar su estrategia en presentarse a concursos para proyectos de hospitales de gestión privada tanto en la Comunidad como en otras autonomías -ya tiene los de Alzira, Torrevieja y Dénia-, así como «en otros negocios». Pese a ser la caja accionista de Iberdrola, Olivas no quiso dar una opinión sobre la OPA de Gas Natural a Endesa, que, de prosperar, llevaría a la eléctrica vasca a comprar parte de los activos de Endesa.Respecto a las comisiones, la entidad percibió el año pasado un total de 153,4 millones de euros. García Checa explicó que, gracias al «Compromiso Bancaja», el 70% de los clientes ya no pagaba la comisión por mantenimiento y que el coste de suprimirla al 30% restante sería de 8 millones. A obra social, la caja destinó 58 millones, un 26% más.