«Su mérito fue conseguir que Fuente del Jarro nunca perdiera el ritmo de la modernización porque el éxito no es sólo llegar a un nivel sino saber mantenerlo». Con estas palabras definía ayer el gerente de Asivalco, Joaquín Planells, al histórico presidente de la entidad, José Luis Abad, que falleció el pasado fin de semana.
Abad, que llegó a la presidencia en 1987 y la dejó 18 años después, estuvo al frente del polígono Fuente del Jarro, el más importante de Paterna y un referente en toda el área metropolitana de Valencia.
En su despedida fue nombrado presidente de honor y se le hizo entrega de la insignia de oro de Asivalco, en reconocimiento a su trayectoria.
Tanto en la agrupación empresarial como en el consistorio le recordaban ayer como la persona que tuvo que impulsar los grandes proyectos en Fuente del Jarro, entre ellas las obras de remodelación del polígono, que se acometieron a través de un convenio con el Sepes y el Ayuntamiento de Paterna. También el actual edificio y la construcción de la guardería fueron uno de sus proyectos aunque lo culminó su sucesor.
Iniciativas culturales y solidarias
Otras de las iniciativas que se le atribuyen son haber financiado un centro ortopédico de la India, a través de la Fundación Vicente Ferrer, así como los premios de medio ambiente, el concurso de fotografía, la participación de Proyectos Equal (para colectivos desfavorecidos) con los municipios de l'Horta Nord.
Con Abad en la presidencia, Asivalco fue el motor de la Federación de Polígonos Fepeval, de la que fue el primer presidente, lo que permitió a Asivalco formar parte posteriormente de la Coordinadora Española de Polígonos Empresariales, que hoy preside su sucesor, Santiago Salvador. En sus últimos años al frente de Fuente del Jarro se realizó el primer Congreso de Polígonos.
Además, en su etapa se acentuó la relación de Asivalco con el movimiento asociativo de Paterna, ya que la entidad empresarial se unió a reivindicaciones relativas al transporte público o contra la construcción del segundo by-pass. Una de sus grandes aspiraciones, la de mejorar los accesos, todavía no se ha cumplido.