Aunque «la música no es una competición», lograr el reconocimiento en un certamen independiente, fuera de los circuitos convencionales «es un indicativo de que estás haciendo las cosas bien y te da serenidad». Así valora el músico de Aldaia José María Santandreu el premio que acaba de recibir —una de las 23 medallas de plata que se han concedido en este trimestre— de la plataforma independiente de California Global Musical Awards.
A la competición optaban más de 25.000 músicos de todo el mundo, de los que un 15% pasó la primera criba. Y de ellos unos 50 han recibido galardones de oro, plata o bronce. El reconocimiento lo ha recibido por su trayectoria como intérprete y por su segundo CD, «Sounds of the clarinet», grabado entre Valencia y Holanda —una de las sesiones en el TAMA de Aldaia— con quince piezas de 10 compositores de distintos países, donde se incluye desde tango a música electrónica y contemporánea.
Como la mayoría de músicos valencianos, Santandreu comenzó a estudiar música en la banda de su pueblo y luego completó su formación en los conservatorios de Torrent, Bunyol, Valencia y Viena. Se define como un clarinetista «sin etiquetas» al que le gusta interpretar tanto clásico como contemporáneo e incluso explorar el pop, el new age o el swing, como hará en el tercer trabajo discográfico que prepara, «Colors of Clarinet» con acompañamiento de piano.
Actualmente trabaja en el Conservatorio de Utiel, está vinculado a la Unió Musical d'Alaquàs, pertenece al proyecto Ensemble d'Arts (radicado en Rafelbunyol) y es miembro de la Universal Simphony Orchestra y la Orquesta del Reino de Aragón. Recientemente ha sido invitado por el Ayuntamiento de Aldaia a integrarse en el Consell de la Música, al igual que otros músicos profesionales y las entidades locales. En 2011 publicó su primer trabajo, «Clarinet for you» y, tras el éxito de su segundo álbum, prepara el tercero. Habitualmente imparte «master class» y participa en festivales.
«Un trabajo a fuego lento»
Sobre el premio, valora que sea una plataforma independiente «integrada por músicos profesionales que votan de forma anónima» la que le haya otorgado este reconocimiento, frente a otros «más convencionales controlados por las compañías discográficas». Con todo, considera que un galardón, si bien anima «y es también un premio para tu familia y tus amigos que te han apoyado desde siempre», es un paso más en la trayectoria de un músico en la que «el nivel se consigue con trabajo y se tiene que demostrar cada día, en cada actuación».
José María Santandreu considera que en la Comunitat Valenciana, «el panorama musical está totalmente desenfocado» y hay que tomarlo «con más seriedad» por todas las partes implicadas: los músicos, el público y las instituciones. «No se pueden hacer conciertos y recitales gratis. A veces queremos promocionarnos pero tenemos que valorarnos como músicos, no acostumbrar al público al todo gratis, o a pagar por un musical 50 euros y luego no estar dispuesto a pagar tres euros por la banda de tu pueblo. Si una charanga cobra por tocar en la calle, ¿por qué no un cuarteto de cuerda en un escenario?», afirma.
Y en ese camino de poner a los músicos en el lugar que les corresponde señala a las instituciones, ya que opina que han de destinar recursos suficientes para contratar formaciones valencianas en las programaciones de «la gran cantidad de infraestructuras que tenemos». Todo ello cree que contribuirá a regular mejor el sector y salir de la precariedad.
