Cinco años después de renovar toda la iluminación, Alcàsser sigue medio a oscuras. La alcaldesa Eva Zamora (PSPV) ha solicitado a la empresa Inelcom, investigada dentro de la Operación Taula, que cambie unas 700 de las 2.112 bombillas leds que se instalaron entre 2013 y 2015, durante el anterior gobierno del PP, y que han perdido más del 50% de luminosidad. El caso de Alcàsser se agrava porque es la segunda vez que piden la sustitución de leds. Ya en 2016 Inelcom cambió otra partida de más de medio millar de bombillas por el mismo motivo.
En ese caso, la empresa sí accedió a la sustitución reconociendo que había una deficiencia por la falta de disipación del calor que va quemando la bombilla poco a poco. Sin embargo, la nueva petición no ha sido esta vez atendida por lo que el ayuntamiento pedirá una reunión con Diputación de València para analizar el caso e incluso valora emprender acciones judiciales.
«Desde hace un par de meses hemos estado mandando correos electrónicos y llamando a la empresa para que cambien las bombillas, pero no hemos obtenido respuesta,», asegura Zamora. La alcaldesa pide que sean sustituidas unas 700 bombillas «porque siguen estando en garantía, pues están dentro de los cinco años de su compra y además se nos aseguraron 50.000 horas de vida, unos 17 años más o menos, y no han durado ni tres».
Las bombillas afectadas están situadas en la zona céntrica, en calles como Sant Martí o Sant Miquel y «son múltiples las quejas de los vecinos». Estas bombillas corresponden a una segunda fase. Hay que recordar que Alcàsser, entonces gobernada por Remedios Avia (PP) adquirió en 2013, valiéndose de las subvenciones del Plan de Eficiencia Energética del Alumbrado Público de la Diputación de València, un total de 2.112 luminarias valoradas en unos 400.000 euros que repartió en tres fases. En una primera remesa instalaron 798 leds, de las cuales la mayoría fueron sustituidas por su baja luminosidad en 2016. En 2014, se hizo con otra remesa de 652 bombillas,que son las que ahora han bajado la intensidad. Las 662 instaladas en 2015 en un atercera fase «por ahora se mantienen y de momento no es necesario cambiarlas», afirma Zamora. La alcaldesa pretende pedir una reunión al presidente de la Diputación, Jorge Rodríguez, para buscar una solución e incluso están valorando emprender acciones judiciales «aunque hay que ser cautos porque puede ser un proceso demasiado», afirma.
Preocupación vecinal
Sin embargo, la alcaldesa es consciente de la necesidad de aumentar la luminosidad en las calles de Alcàsser y por eso valora destinar una partida dentro de los presupuestos a sustituir las leds por otras luces de mayor calidad.
«Lo más probable es que tengamos un remanente en la liquidación del presupuesto anterior y podamos destinar una amplia partida-que puede alcanzar los 200.000 euros- en el cambio de luces con su correspondiente proceso de contratación», afirma Zamora.
En una reciente encuesta popular realizada en la población donde se preguntaba a los vecinos en qué destinar 30.000 euros del presupuesto, la segunda opción elegida fue mejorar la iluminación en las calles de la «Volta»de la procesión, curiosamente iluminadas con luces que ya fueron cambiadas en 2016. «Hemos hecho pruebas en una calle con luces diferentes e iluminan mucho más que las leds de Inelcom, y la gente quiere esas bombillas», explica Zamora.
