«Que el Ejército se va y recuperaremos esos terrenos llevo oyéndolo 40 años». Así se pronuncia un vecino de Paterna del barrio Campamento escéptico ante la posibilidad de que algún día la ciudad se haga con el suelo que hoy ocupan los cuarteles militares, en pleno centro de la ciudad, tras haber seguido las diversas negociaciones que, desde hace dos décadas, ha realizado de forma oficial el consistorio con el Gobierno. Si bien en otros tiempos, el ministerio estaba abierto a esa posibilidad e incluso llegó a plasmarla en un convenio a largo plazo, actualmente el criterio ha cambiado y Defensa no se plantea abandonar Paterna ni tampoco trasladar ese cuartel a otro emplazamiento más pequeño para desafectar el suelo.
Con la pregunta de si el Ejército debe dejar la ciudad para liberar estos 400.000 metros cuadrados de terrenos, Levante-EMV recorrió ayer el barrio Campamento y obtuvo opiniones de todo tipo de la ciudadanía. En general, a los vecinos y vecinas no les molesta la presencia del Ejército después de más de un siglo de convivencia, especialmente desde que se suprimió el Servicio Militar Obligatorio, ya que su presencia es ahora más reducida. Pero muchos de ellos también reconocen que el barrio necesita una gran zona verde, instalaciones deportivas y otras dotaciones.
María Jesús Sanfélix, de 54 años y trabajadora de la cocina de los cuarteles, defiende que el Ejército se quede donde está «o al menos en Paterna». Aunque en el complejo militar hay unos 400.000 metros cuadrados para unas 200 personas, explica que «cuando vienen de otros puntos para realizar maniobras, se necesita todo el espacio». «Si se cediera una parte, tendrían que ir a Bétera o Marines», añade.
José Díaz indica que, tras 25 años en el barrio de Campamento, está acostumbrado al Ejército. «Muchos soldados son vecinos», añade. Además, teme que si «abandonan» las instalaciones, «hasta que el ayuntamiento intervenga, se llenarían de okupas como pasó en la colonia». Consuelo Martín defiende «la cantidad de gente que vive del cuartel» mientras que Jorge Franco opina que sería «muy importante» para la ciudad ganar ese suelo para «parques, instalaciones deportivas, un aparcamiento y otros servicios». Similar opina Verónica Vidal ya que con un hijo pequeño ha de ir en coche al Parque Central para disfrutar de una zona verde.
