¿Se imaginan un país donde estuviera prohibido pasatiempos tan edificantes como lamer sapos o donde estuviera prohibido, por deseo presidencial, tener coches negros? Aunque lo pueda parecer, no es el inicio de una leyenda o un cuento infantil. Una vez más la realidad supera la ficción. Estas son algunas de las leyes más absurdas.

Coches negros prohibidos. Turkmenistán es una república ex-soviética situada en Asia Central. A pesar de tener un tamaño comparable a España, en sus fronteras viven poco más de cinco millones de personas sujetas a los designios del «presidente vitalicio» Gurbanguly Berdimuhamedov. El dirigente tiene una auténtica obsesión por el color blanco, que está asociado a la buena suerte, y es por ello que cientos de edificios de su capital (Ashgabat) están recubiertos en carísimo mármol blanco.

Su última ocurrencia ha sido la repentina prohibición de los coches de color negro en todo el país. Ahora, sin previo aviso, miles de coches negros han sido incautados en Turkmenistán, y sólo son entregados a sus propietarios si se comprometen a repintarlos de color blanco. Esto ha provocado que los talleres de chapa y pintura se hayan visto desbordados.

Protección de langostas. Suiza ha prohibido la práctica culinaria de tirar langostas vivas en agua hirviendo como parte de una revisión de su legislación en materia de protección animal. «Los crustáceos vivos, incluida la langosta, ya no podrán ser transportados sobre hielo o agua helada. Las especies acuáticas deben mantenerse en su entorno natural. Desde ahora los crustáceos deben ser aturdidos antes de matarlos», dice la normativa.

En Suiza, además, está prohibido por ley tirar de la cadena a partir de las diez de la noche, un gesto que puede conllevar multas.

Escoceses armados. En virtud de una antigua ley no derogada, en Reino Unido está permitido «matar a un escocés» solo si va armado de «arco y flechas». No es la única prohibición delirante en este país. Así, está prohibido morirse en el Parlamento.

Napoleón y coches sucios. En Francia está vetado llamar Napoleón a los cerdos, mientras que en Rusia se prohíbe conducir un coche si está sucio, aunque la legislación no especifica qué significa sucio.

Sapos y bikinis. En Los Ángeles, EE UU, está sancionado lamer sapos. Aunque si se buscan leyes absurdas gana por goleada Ohio, que prohíbe a las mujeres calzar zapatos de charol con el fin de que no se refleje su ropa íntima. En Italia hay pueblos de costa donde multan a las mujeres consideradas «poco atractivas» o con sobrepeso si se pasean en bikini.