El Levante UD inicia ahora su verdadera Liga. El equipo azulgrana ha cambiado de entrenador, ha llegado Rubi, y afronta a partir de ahora una serie de encuentros ante rivales que luchan por un mismo objetivo. Es el inicio de todo. El verdadero momento para centrar las posibilidades reales del club esta temporada. Es un kilómetro cero.

Después de un mal inicio de temporada, que le ha llevado a mirar la clasificación hacia arriba, el Levante UD está en un pozo numérico del que se antoja complicado salir. Pero ha tomado medidas. Tras el pésimo arranque de campeonato, y la destitución de Lucas Alcaraz, se ha encomendado a Rubi en el banquillo. Y, sobre todo, se ha marcado un objetivo en estos siete partidos que restan hasta final de año, que no son precisamente ante los rivales de empaque contra los que ya ha jugado.

La buena imagen del pasado sábado en Mestalla. El marcador de 3-0 ante el Valencia CF es demasiado abultado por los méritos de uno y otro equipo durante los noventa minutos, invita al optimismo. Porque el Levante UD ofreció durante sesenta minutos su mejor imagen de la temporada. Así de claro. La contundencia del marcador de Mestalla, el Valencia CF sólo jugó a placer en el tramo final del encuentro, cuando su rival bajó los brazos, debe servir como un punto de apoyo de cara a las próximas citas ligueras.

Y esos compromisos ante rivales de la misma Liga comienzan este sábado en el Ciudad de Valencia contra el Deportivo (18.15 horas). Es un partido de obligado cumplimiento. De los que no se puede fallar. Tras el choque ante el Deportivo, el Levante UD buscará puntar ante el Sporting, domingo 22 de noviembre a las 12.00 horas, recibirá en casa al Betis en un encuentro de viernes (20.30 horas), y el 7 de diciembre visitará al Espanyol en Cornellà (20.30 horas). Antes de cerrar vel año, el equipo de Rubi visitará al Athletic en una complicada salida, la más complicada antes de final de año, y recibirá al Málaga en casa en un encuentro también en los que hay que lograr los tres puntos.