La fiscalía ha pedido una pena de tres años de prisión para el antiguo apoderado de una promotora de Dénia al que acusa de un delito de apropiación indebida por quedarse supuestamente con 662.042 euros, según informaron ayer fuentes de la acusación pública. Los hechos ocurrieron entre 2007 y agosto de 2009, cuando el acusado, según el fiscal, expidió presuntamente desde esa mercantil multitud de pagarés a favor de otra empresa de la que era socio único y con la que la anterior no tenía relación comercial de ningún tipo.

También habría realizado reintegros en efectivo que, al parecer, no estaban justificados, sostiene la acusación pública, que ha rebajado de 4 años y 6 meses a 3 años su petición de condena para el procesado, al eliminar de su calificación jurídica de los hechos el carácter continuado del delito.

Por su parte, el acusado ha negado los hechos durante el juicio, que se celebró ayer en la sección segunda de la Audiencia de Alicante, y ha aportado una voluminosa documentación que, según la defensa, justificaría el destino del dinero y probaría la inexistencia del delito.

El procesado ha argumentado en la sala que no proporcionó esos documentos durante la instrucción de la causa porque no los tenía a su disposición, sino almacenados en el sótano de un piso que le había sido embargado.