Tres apasionados de la montaña han dado con el eslabón perdido de la prehistoria de Pego. José Sendra, Juan Pastor y Fernando Sendra son excursionistas curiosos. Estos tres amigos pegolinos decidieron hace poco inspeccionar de cabo a rabo el barranco de la Canal, devastado hace un año por el incendio que calcinó 1.715 hectáreas en Pego, la Vall d´Ebo, l´Atzúbia y la Vall de Gallinera. «Ya la habíamos pasado de largo. Pero Pep se giró y vio la cueva», explicó ayer Fernando Sendra. Decidieron echar un vistazo. «Y vimos la pintura», recordó José Sendra, quien en seguida pensó que aquella mancha era la representación de un ciervo. Dio en el clavo.

Los tres senderistas descubrieron así, un poco por casualidad, la primera evidencia de pintura rupestre en Pego. Los expertos están convencidos de que allí, en el barranco de la Canal, hay más arte levantino, así como yacimientos neolíticos. La pintura, de hecho, pertenece a ese periodo. El ciervo, dibujado de forma naturalista y que está herido en el vientre por las flechas de un cazador, se pintó hace 8.000 años.

La especialista en arte prehistórico de la Universidad de Alicante Virginia Barciela, que ya está estudiando este hallazgo, mostró ayer una imagen con los colores más contrastados en la que la figura del ciervo sí asoma con claridad. Se adivina su poderosa cornamenta. «Los contornos están muy bien definidos. Está representado con gran detalla y realismo», apuntó Barciela.

La experta analizará ahora in situ la pintura, realizará calcos y hará la topografía de la cueva. «También contextualizaremos el yacimiento y lo vincularemos a otros», avanzó.

Este ciervo arrima las representaciones del arte levantino al prelitoral de la Marina Alta. Estas representaciones habían aparecido hasta ahora en valles del interior.

El jefe del servicio territorial de Patrimonio, Josán López, subrayó que este hallazgo se ubica en un lugar de paso entre los valles y la costa. «Es excepcional», dijo. Y presagió que en el barranco de la Canal se descubrirán yacimientos y más arte parietal. Este ciervo pintado hace 8.000 años abre en canal la posibilidad de sacar a la luz la hasta ahora ignota prehistoria de Pego.