La asociación protectora de animales Pluto, que tiene sede en Teulada, ha presentado varias denuncias ante la Guardia Civil, el ayuntamiento y el juzgado de Dénia contra los propietarios de perros que los tienen confinados en jaulas estrechas y sucias de excrementos. La protectora ha logrado rescatar a dos podencas, una de 7 años y otra de 12. Los informes veterinarios confirmaron que ambas sufrían atrofias musculares por estar recluidas en «espacios pequeños». La de más edad padecía una tumoración mamaria y una alergia por la picadura de pulgas; murió al año de ser liberada por la protectora.

Esta asociación sigue pugnando para rescatar a los otros canes. Grace Jolanta Boas presentó hace un año una denuncia en el juzgado de Dénia. Era contra el dueño de al menos cinco perros a los que tenía «encarcelados» (es el término que figura en la denuncia) en una vivienda a medio construir situada en el Camí de Sant Miquel. Asegura que los canes no salían nunca de su encierro. Algunos estaban dentro de la casa «y apenas recibían luz del día». Otros se hallaban en una jaula. La protectora advirtió de que ese espacio estaba repleto de excrementos. En la denuncia, adjuntó fotografías en las que se apreciaba la suciedad. También aseveró que los animales estaban mal alimentados.

El juez de Dénia archivó las diligencias al entender que no existía infracción penal. La protectora, en la querella, reflejaba la postura del ayuntamiento, que alegaba que la ordenanza municipal no contemplaba el confinamiento de estos perros como maltrato animal. Sin embargo, Grace Jolanta sí advirtió en la denuncia que la normativa de la Comunitat Valenciana deja claro que tener a las mascotas en malas condiciones sanitarias es constitutivo de una infracción grave.

La protectora, pese al archivo, sigue reclamando al consistorio que intervenga para que el dueño les entregue los animales y los puedan dar en adopción a propietarios que los cuiden adecuadamente.

Grace Jolanta lamentó que desde el consistorio se les reproche que no entiendan la «cultura española».

La protectora también ha trasladado al ayuntamiento casos de confinamiento de perros que les hacen llegar vecinos y turistas. El pasado 3 de abril presentó una instancia en la que avisaba de que un perro grande estaba «permanentemente encerrado sin comida ni agua y en condiciones higiénico sanitarias asquerosas» en una jaula de 1,30 metros por 80 centímetros. Este can se hallaba en una vivienda de la partida de Benimarco. Otros colaboradores detectaron en la misma zona que tres perros estaban hacinados en una jaula de dos metros por 90 centímetros.

«Estos animales no paran de ladrar y se vuelven agresivos. Están privados de todo tipo de afecto y enferman por la falta de higiene y cuidados», precisó la portavoz de la protectora de Teulada.s