El hotel de 5 estrellas de la Sella, propiedad de la familia Bañó, deja atrás los problemas económicos que llevarona que saliera en 2015 a subasta pública por 2,7 millones (quedó desierta). Después de negociar los propietarios con inversores nacionales e internacionales, ya se ha cerrado un acuerdo de compra. Abierto en 2003, este hotel, que está junto al Montgó, es desde el pasado día 2 propiedad de Alantra, gestionado por GAT Gestión de Activos Turísticos, que ya cuentan con activos como Gran Hotel Durango, Hotel Guadalmina, Holiday Inn Madrid e Intercontinental Mar Menor, entre otros. La familia Bañó mantiene la titularidad y gestión del campo de golf.

GAT se ha hecho cargo del edificio y de la totalidad de los empleados para continuar dando servicio, planteando una reforma para el próximo invierno y la posibilidad de una nueva franquicia también a finales de año.

Los resultados de explotación del hotel en 2017 reflejan una mejora del 26% con respecto al año anterior.

Estos datos, junto con el Informe Hotelero realizado por BNP Paribas Real Estate, auguran buenas perspectivas para el sector, pronosticando un nuevo récord de visitas en 2018, creciendo en ingresos por habitación disponible. Sobre la media de España, crecieron en ambas categorías Valencia, Andalucía y Canarias.

El campo de golf y otros servicios del resort siguen dirigidos por el grupo La Sella, que ve saneadas sus cuentas con esta operación y que "confía en mantener buenas relaciones con la nueva propiedad, que por seguro son un grupo de profesionales que llevarán al resort y a Dénia a ser una referencia en el sector turístico".

Para el grupo La Sella, el año 2018 también estará lleno de proyectos, incluyendo un campo de fútbol junto al hotel que atenderá la demanda latente de touroperadores deportivos en invierno y el interés de todos los sectores sociales en aumentar las visitas a la comarca de La Marina Alta fuera de temporada.