El Ayuntamiento de Sagunt ha perdido la esperanza de llegar a una solución amistosa con el Grupo Bertolín, empresa adjudicataria de la reurbanización de la calle Valencia, que lleva varias semanas paralizada por la exigencia, rechazada por el consis, de aumentar el presupuesto de las obras como consecuencia de los restos arqueológicos hallados. Y es que después de las continuas negociaciones durante el último mes, el concejal de Contratación, Pepe Gil, apunta que «estamos indignados con la empresa, porque lo que pretende es abusar del ayuntamiento y también de los vecinos, que, al final, son los más perjudicados».
El siguiente paso del consistorio, según apunta el edil de Compromís, será emitir una resolución de alcaldía en la que «se obligue de forma inequívoca a la empresa a dar continuidad a las obras sin más interrupciones». Esta idea ya ronda al responsable de Contratación desde hace unos días, pero reconoce que «el asunto lo están estudiando en profundidad tanto los arquitectos como los servicios jurídicos con el objetivo de dejar el asunto totalmente atado para que la empresa no pueda escaparse». Uno de los objetivos de esta medida es evitar la rescisión del contrato que retrasaría la ejecución.
Como ha venido insistiendo desde que surgió este desencuentro con el Grupo Bertolín, las condiciones de este contrato que salió a licitación por 864.000 euros «estaban claras» para todas las empresas que se presentaron al concurso, un total de 16, y entre ellas había una reserva presupuestaria de 40.000 euros para hacer el seguimiento arqueológico de la actuación.
No ejecutar las mejoras
Bajo el argumento de que este dinero no cubre los gastos debido a la importancia de los hallazgos, una de las ofertas de las empresa fue no ejecutar las mejoras a las que se había comprometido en la fase de licitación, que afectan a los pluviales, el chapado de piedra en carchata pequeña, las barandillas frente a la iglesia, la plaza del Salvador, la iluminación de la iglesia, el alumbrado público, así como la jardinería y riego. todas ellas están valoradas en casi 170.000 euros.
Cabe recordar que la adjudicación del contrato al Grupo Bertolín se formalizó en marzo por un valor de casi 616.000 euros.
