La gran carpa que instaló ayer por primera vez el Ayuntamiento de Torres Torres permitió garantizar al 100% que la lluvia no obligará a suspender las orquestas y otros actos de las fiestas patronales, como en otras ediciones.
Ésta es sólo una de las novedades que ha impulsado el nuevo equipo de gobierno local del PSPV y Compromís, ya que la habitual cena se trasladó el domingo hasta la plaza principal de la localidad. De este modo, se pretendía ganar espacio y comodidad, al tener a mano el lugar escogido para los espectáculos, así como varios bares.
En esta cita se siguió el modelo ya implantado el año anterior cuando el consistorio dejó de costear el bocadillo como medida de ahorro. Aunque la cena reunió a numerosos vecinos, desde el PSPV local se lamentó la ausencia de los ediles del PP. «Sólo vimos a uno de ellos, haciendo fotos durante el montaje, a los operarios a los que ha contratado el ayuntamiento este año para estas tareas, pues se está haciendo todo cumpliendo con la legalidad. Luego ya no acudieron, por mucho que antes nos criticaban a otros si no íbamos a los actos de las fiestas», decía el secretario local del partido, Nacho Maravilla.
