El Ayuntamiento de Sagunt deberá acometer la segunda fase de las obras del Casino de AHM y ampliar las instalaciones de la Unión Musical Porteña como aprobaron las fuerzas políticas de la oposición en el pleno municipal de esta semana donde apoyaron la propuesta presentada por Iniciativa Porteña (IP), que recibió el voto contrario de los doce concejales del equipo de gobierno de Sagunt. Como se señala en esta propuesta, estas actuaciones se realizarán con parte de la subvención que se prevé percibir desde la Diputación de Valencia y, en el caso de que no llegue esta ayuda o haya algún impedimento para usarla para este fin, será el consistorio el que genere una partida presupuestaria para ejecutar estas obras.
Una de las obras que se propuso desde IP fue la rehabilitación de la primera planta del Casino que, según aseguraron, «se encuentra en un estado deplorable que la inhabilita para cualquier uso»; asimismo, otro de los lugares donde actuar es en el ala oeste de las oficinas de la Gerencia, donde reciben clases los alumnos de la Unión Musical Porteña, entidad que ha pedido una ampliación de sus instalaciones en el espacio existente en el sótano.
Una de las cuestiones que generó más debate durante la sesión plenaria fue el futuro uso de la Gerencia. La oposición defendió la postura de que debía seguir siendo de uso administrativo, como así marca el proyecto de remodelación, para que sea la sede de la descentralización de los servicios municipales del ayuntamiento, pero desde el equipo de gobierno se propuso que fueran los propios ciudadanos quienes, a través de un plan integral de rehabilitación, decidieran el uso de este conjunto patrimonial del Port de Sagunt, algo que rechazaron el resto de formaciones.
No al voto ciudadano
«Nosotros apostamos por poner en marcha un plan de rehabilitación porque pensamos que la decisión del futuro de la Gerencia debe ser algo que decidan todos los vecinos, la sociedad civil de la ciudad. Pensamos que su uso tiene que ser educativo y no administrativo», aseguró la portavoz del equipo de gobierno, Teresa García. Por su parte, el portavoz de IP, Manuel González, aseguró que el ayuntamiento tiene «una deuda histórica» con los vecinos del Port de Sagunt para acercarle los servicios administrativos.
«El edificio se ha reformado para recoger los servicios municipales que se consensúen entre todos porque es una reivindicación que han hecho los ciudadanos desde hace muchos años; se actuó sobre estas oficinas porque se caían abajo y no podíamos permitir que cayera un emblema del patrimonio de El Puerto», afirmó el edil segregacionista mientras recordaba que el proyecto de remodelación se quedó paralizado cuando surgió el problema por la titularidad de este conjunto patrimonial entre el consistorio saguntino y ArcelorMittal. «Algo que ya está resuelto puesto que se ha conseguido que la Gerencia sea pública», aseguró.
