El Castillo de Sagunt cerrará su acceso principal con motivo del inicio de las obras de restauración de parte de sus murallas impulsadas por el Ministerio de Cultura. Para mantener el monumento abierto a las visitas, el ayuntamiento y la conselleria de Cultura buscan fórmulas por facilitar el paso por la zona del centro de recepción de visitantes, acabado desde 2010, pero que se mantiene cerrado por la falta de suministro eléctrico.
Aunque el centro permanecerá clausurado, la intención es habilitar la entrada al Castillo por esta zona hasta que finalicen las obras. Sin embargo, este nuevo acceso no se encuentra en buen estado, ya que es inaccesible para personas con problemas de movilidad y presenta demasiada inclinación, por lo que el consistorio ha solicitado a la Generalitat que le permita mejorarlo. Sin embargo, tal y como avanza el concejal de Patrimonio de Sagunt, Pablo Abelleira (ADN Morvedre), la administración autonómica justifica su no en la presencia de restos arqueológicos que pudieran verse afectados en el entorno por el paso de los visitantes.
Ante esta negativa, el alcalde de Sagunt, Quico Fernández, y el propio Abelleira visitarán hoy este acceso provisional para tratar de buscar alternativas, aunque el edil de ADN ya ha avanzado que hay pocas opciones.
El delegado del área revelaba a Levante EMV que ésta es la única entrada posible al Castillo, ya que desde el consistorio se ha descartado el acceso sur, lo que les obligará a insistir en la concesión del permiso de conselleria para poder actuar allí. «La rampa está muy empinada y el camino tampoco está en las mejores condiciones para que pase la gente», explicaba Abelleira.
Pero hay otro problema añadido: El comienzo de las obras de restauración de la muralla, que pueden iniciarse en 20 días o en dos meses, el consistorio debe solucionar los problemas de este segundo acceso antes del inicio de las actuaciones para evitar que el Castillo cierre sus puertas, un extremo impensable para el ayuntamiento.
Ganar tiempo
Ante esta coyuntura, la administración local pedirá al ministerio que la intervención se inicie por la muralla más al sur del monumento de manera que la puerta principal permanezca abierta al no quedar afectada. «Así ganamos tiempo para actuar en el acceso del centro de visitantes y tener una alternativa de entrada cuando las obras comiencen junto a la puerta principal», afirmaba el edil de Patrimonio.
Cabe recordar que la actuación contempla la consolidación y restauración de murallas de la zona de acceso al Castillo, junto a la puerta principal, y la parte oeste de la Plaza de San Fernando, obras que se adjudicaron en noviembre por un importe de 522.520 euros a la unión de empresas temporal formada por Seranco SA y Wenceslao García Pintura y Decoración, que presentó la oferta económica más ventajosa.
Las obras de restauración de las murallas del Castillo se contemplan en los presupuestos del estado con 536.000 euros aunque también se había presupuestado en 2015 otros 200.000 euros que no se llegaron a invertir.
