Los falleros de la comarca miraban ayer más que nunca al cielo durante la «plantà» que tuvo lugar anoche es decir, con 24 horas de antelación respecto al calendario de la capital y bajo un intenso frío.
La lluvia de la tarde ya hizo que muchos trabajos se interrumpieran y se demoraran al máximo para proteger el mayor tiempo posible a los «ninot» y evitar daños. De hecho, el domingo por la noche chispeó y ello condicionó la colocación de algunos remates en la sección especial.
En concreto, los falleros de La Victòria tuvieron que lidiar con las finas gotas mientras una pluma los colocaba. Además, ayer tenían previsto repasar de pintura algunos ninots que se habían visto afectados. «Nos han dicho que hay tiempo suficiente, que lo podrán hacer perfectamente y que el resultado será bueno. Nos queda ese consuelo porque, por cuestiones de tiempo, la pluma no pudo venir hasta la noche, justo cuando llovió un poco, y a esa hora el resto de las fallas de especial ya tenían colocados sus remates», explicaban ayer a Levante-EMV, antes de la noche decisiva.
Hoy por la mañana será el turno de los jurados, que ayer se eligieron por sorteo para cada sección en la mesa de presidentes, como confirmaba el presidente de la Junta, Enrique Docón.
Para esta tarde, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) espera una alta probabilidad de lluvias en las visitas de cortesía que tienen programadas las comisiones de la comarca a las fallas de Faura y Gilet. Este porcentaje se reduce en el caso de la entrega de premios que se hará mañana por la tarde a las puertas del ayuntamiento, si bien vuelve a aumentar hasta el 30% el jueves (el día de la visita a las fallas del Port de Sagunt), al 55% el viernes (día de la ofrenda en Sagunt) y al 35% el sábado, cuando se realizará la ofrenda en el Port y la cremà.
En unintento de esquivar el mal tiempo, no han faltado las falleras mayores que han llevado huevos al convento de las hermanas servitas de Sagunt, con ánimo de que «todo ayude».
