La colaboración ciudadana permitió a la Guardia Rural de Sagunt identificar al autor de un vertido de varias placas de uralita en el cauce del río Palancia. Fue concretamente a la altura del puente de Petrés, más allá de los campos de Xulla, donde un vecino fotografió a primera hora de la mañana de ayer a un camión que se estaba deshaciendo de este material, cuya peligrosidad radica en su manipulación en caso de rotura.
Esa instantánea se trasladó a los responsables de la Guardia Rural, que acudieron rápidamente al lugar y comprobaron la veracidad de los hechos, además de aprovechar la imagen para identificar el número de la matrícula y de esta forma denunciar el vertido, cuya retirada, según ha ocurrido en otros casos, tendrá que realizarse a través de una empresa especializada.
Fuentes del este cuerpo de vigilancia rural confirman a Levante-EMV que varios de sus agentes procedieron hace menos de un mes a limpiar diferentes vertederos ilegales a lo largo del término municipal, entre los que se encontraba este emplazamiento. También desde el Consell Agrari de Sagunt se apuntan las maniobras que tuvo que hacer el autor del vertido del fibrocemento, ya que «habíamos instalado unas piedras pesadas para dificultar el acceso y las tuvo que mover para meter el camión y descargar».
Tras estos hechos, la Guardia Rural ya ha ideado un nuevo método para intentar impedir este tipo de vertidos. Se trata de una tierra vegetal que se utilizará en diferentes partes del río, cuya retirada es mucho más compleja y dificultará todavía más que se pueda retirar. Este método, además, también tiene el añadido del valor ambiental por la riqueza que aporta este material en el que se mezclan compuestos animales y vegetales en descomposición
Posibles sanciones
Sobre las sanciones que este tipo de vertidos pueden acarrear al causante, fuentes de la Guardia Rural apuntan que los cambios introducidos en la Ley de Residuos contemplan, cuando se trata de depósitos ilegales de sustancias peligrosas, como es el caso detectado ayer al tratarse de fibrocemento, multas de hasta 9.000 euros en caso de considerarse una infracción leve hasta los 1,7 millones de euros si se estima que el caso es muy grave.
