El requisito de prohibir la entrada de perros a cualquier playa que aspire a obtener el distintivo de la bandera azul ha llevado al Ayuntamiento de Sagunt a «revisar» el proyecto que tenía ya en marcha para habilitar una playa para perros al norte del Port, concretamente entre Ciudadmar y Canet d'En Berenguer.
Así lo ha reconocido a Levante-EMV el concejal del área, José Vicente Muñoz, quien hace unos días anunció el visto bueno definitivo de la Demarcación de Costas para ofrecer este espacio para el esparcimiento de los animales de compañía. Sin embargo, la pérdida del distitivo en la playa de Pinedo al dar cabida a los perros ha obligado al consistorio a replantearse esta opción, que el edil de EU admite que ahora está «en revisión».
Mientras, la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac) que, integrada en la Foundation for Environmental Education (FEE), se encarga de otorgar las banderas azules, ha confirmado a este rotativo que, «pese a la creciente sensibilidad que hay sobre la necesidad de dar cabida a estos animales, hay varios informes, entre ellos alguno de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que desaconseja que humanos y perros compartan espacio en las playas, fundamentalmente por el riesgo de transmisión de enfermedades a través de los parásitos y los excrementos».
De esta forma, desde esta organización no gubernamental se anima a los ayuntamientos a que directamente renuncien al distintivo en caso de que se permita la presencia de animales, un punto sobre el que los consistorios «se han mostrado comprensivos».
Descontrol con los animales
En el caso del Port de Sagunt, sin embargo, la separación de su playa con la zona que se pretende habilitar para perros, mediante un espigón y un canal de salida de agua hacia el mar, podría salvar la bandera azul y el proyecto de playa para los animales. «El problema es cuando la presencia de los perros no está controlada y comparten espacios con los bañistas. Sin embargo, en este caso, donde existe una separación, no creo que haya problemas».
De cualquier forma, la próxima semana se iniciará por parte de la Adeac las inspecciones a las playas de la Comunitat Valenciana y esa será la piedra de toque para saber el efecto que puede tener el proyecto para perros en la bandera azul del Port de Sagunt, según reconocen desde la asociación.
