El Ayuntamiento de Sagunt ha emitido una orden de ejecución contra la Demarcación Costas para exigirle una actuación urgente que frene el deterioro de la Torre del Grau Vell y de sus dependencias anexas, después de que la Policía Autonómica denunciara el mal estado en el que se encuentra un conjunto defensivo considerado Bien de Interés Cultural (BIC) desde 2010.
Los desprendimientos detectados últimamente en la torre se suman al deterioro que presenta el almacén situado junto a ella, donde parte del techo está desplomado, como reconocía a Levante-EMV el alcalde de Sagunt, Quico Fernández. En realidad, el BIC del Fortín o Torre del Grau Vell incluye varias construcciones en estado de abandono desde hace años, pese a los intentos municipales de acondicionar la torre, la batería, los almacenes y el patio cercado.
Una denuncia de la Policía Autonómica sobre el mal estado del monumento llevó al ayuntamiento a exigir una intervención urgente al propietario. Primero se dirigió al Sepides, al considerar que este organismo estatal era el dueño. Sin embargo, éste declinó cualquier titularidad y el consistorio ya ha reclamado una intervención urgente a Costas, al entender que la demarcación es su responsable última.
El alcalde, Quico Fernández, afirmaba que la postura municipal es clara. «No sólo le hemos exigido una actuación de urgente. También queremos que nos otorguen una concesión para poder lograr la rehabilitación total del conjunto, con la aportación que estamos negociando con la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) como compensación para la ciudad», apuntaba además de subrayar la ventaja «de averiguar al fin, de quién es el inmueble».
La pretensión del tripartito es que la Autoridad Portuaria «salde al fin la importante deuda que tiene con Sagunt, al no haber destinado a la localidad las inversiones que le corresponderían por el 1% del presupuesto destinado a inversiones culturales», añadía.
Para ello, ultima un proyecto para la puesta en valor de todo el legado histórico del Grau Vell, si bien la prioridad para el alcalde es la recuperación del fortín y luego, el yacimiento.
El coste de la intervención que se está barajando oscila entre los 3 y los 6 millones de euros. Tampoco está claro aún si la intervención se acometería por fases anuales o no.
