El calibre de la mandarina en el Camp de Morvedre está complicando el inicio de la campaña de extratemprana.
La temporada 2016-2017 se abre con cierto parón de los mercados que «han comenzado a comprar de forma muy lenta, cerrando pocos acuerdos comerciales para las fechas en las que nos encontramos».
Así describía el inicio de campaña el presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores en Sagunt (AVA), Francisco Campillo, quien pese a este extraño comienzo auguraba una buena temporada.
Aunque el pistoletazo de salida a la recolección de las variedades extratempranas ya se ha dado, Campillo insistía en que hay mucha incertidumbre en torno a la compra-venta, principalmente a consecuencia de los calibre. «No es que sean pequeños, pero la fruta no tiene el tamaño que demanda el mercado». Esto supone un obstáculo para los acuerdos comerciales, de ahí que los comercios se mantengan a la expectativa de la evolución del fruta. «Están esperando a que el calibre se incremente un poco en los próximo 15 días para cerrar las compras».
La falta de lluvia es la causa principal del tamaño de la mandarina de este año, aunque su ausencia también ha generado que la fruta contenga mayores niveles de azúcar y que la piel no sea tan basta como en campañas anteriores.
Además del calibre, el precio del producto es otro de los motivos de que la campaña «comience con menos alegría. El año pasado, la temporada acabó muy bien con buenos precios y el comercio espera que esta circunstancia no encarezca la fruta, por lo que está a la espera de ver la evolución. Ahora lo que hacen es comprar lo justo».
Pese a estas circunstancias, en algunos puntos de la comarca ya se ha iniciado la «collita», principalmente en la partida de Gausa, aunque se espera que la próxima semana comience de forma masiva en el resto de partidas.
De momento, y según AVA se está comprando muy poco y sin reserva, «lo justo» hasta ver cómo evoluciona el mercado y los precios.
Recolección
A día de hoy, ya se han recolectado algunos campos de la variedad Owari y en breve, se cogerá la Pri 23, una de las variedades de extratempranas con más presencia en la comarca.
En cuanto a la Pri 23, las mismas fuentes revelaban que su precio se sitúa entre los 9 y los 13 euros la arroba; «no está mal si se tiene en cuenta que es una variedad con altos costes de producción y muy susceptible a ser atacada por la mosca de la fruta, dada su maduración temprana», afirmaba Campillo.
Pese a la incertidumbre existente, desde AVA auguran una buena temporada de mandarina y también de naranja en la comarca, pero sobre todo con fruta de calidad y buenos niveles de producción, mayores a los de años anteriores.
