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Crispín cree que no es momento de subir impuestos

Mantendrá su propuesta al considerar que la recaudación debe tener en cuenta la situación de los ciudadanos

El portavoz municipal del PSPV, Paco Crispín, acusa a la concejala de Hacienda, Teresa Garcia de contar «medias verdades» sobre el impuesto de bienes inmuebles (IBI) en Sagunt, además de «eludir el debate político» en el pleno.

El socialista quiso aclarar que la enmienda que presentó tan solo suponía una disminución de la recaudación del impuesto en general de 900.000 euros. Sumando los bloques del impuesto (urbana, industrial, rústica y características especiales), el ayuntamiento tiene previsto recaudar casi 24 millones de euros en 2017, mientras que, con la propuesta del PSPV, los ingresos descenderían a poco más de 23 millones, «una cantidad que dejamos de sacarle a los ciudadanos», según Crispín.

El concejal justifica su propuesta en la necesidad de rebajar la presión fiscal. «Hay que hacer propuestas acordes con la capacidad económica de los vecinos», recordando que Sagunt cuenta con una tasa de paro de un 30 % . Por eso, avanza que mantendrán su propuesta, solicitando al tripartito «austeridad a la hora de recaudar y eficacia en la gestión, racionalizando el gasto».

Crispín acusa al tripartito de subir el IBI más de un 7 % en 2016 respecto a 2015 y hasta un 10,4 %, si sale adelante la propuesta del gobierno adelante para 2017.

Para el líder socialista, la subida «no es de recibo. Los liberados cuestan al ayuntamiento más de un millón de euros» a lo que suma la «pérdida de una inversión de un millón para la reindustrialización por no haber presentado los papeles a tiempo y ahora se rasgan las vestiduras por la propuesta que hemos hecho de IBI, hablando de un agujero de 1,6 millones».

En clave política, Crispín afirma que «esto es el resultado de no tener mayoría» y recuerda a Compromís que los únicos que los han excluido del gobierno han sido ellos. «Hay que recordar cuando el alcalde dijo que con ocho se podía gobernar». No obstante, asegura que «seguimos teniendo vocación de gobierno», aunque matiza que «no se puede pretender que seamos mera comparsa».Crispín apunta como único responsable de esta situación al actual gobierno de Sagunt, «incapaz de logar la estabilidad».

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