«Nunca antes se había tenido acceso a ayudas directas y específicas para la industria desde el cierre de la Fábrica, así que son un éxito para la comarca». Con estas palabras quiere acabar la concejala de Presidencia, Teresa Garcia, con las dudas surgidas tras conocerse los términos de la convocatoria de ayudas de casi 2,7 millones de euros para la reindustrialización de El Camp de Morvedre. En esta línea, la nacionalista también precisa que las subvenciones están destinadas «a las inversiones tangibles o intangibles realizadas en 2016 en la mejora de procesos industriales, así como los estudios o la colaboración externa necesaria para desarrollarla».

Garcia también ha salido al paso de las quejas por la tardanza en la convocatoria, de la que ha culpado al PP que «al final de la pasada legislatura aprobó en solitario que cada nueva línea de ayudas tenga que ir acompañada de la publicación de las bases, con las consiguientes complejidades en el proceso jurídico y administrativo. Este largo procedimiento „según añade„ no será necesario en próximas convocatorias».

Además de insistir en que se ha puesto a disposición de las empresas un servicio de asistencia a la tramitación de estas subvenciones, la concejala de Compromís destaca que la convocatoria «cubre prácticamente todo el sector industrial de la comarca con lo cual podemos atender y reforzar nuestro sector productivo, ayudando y motivando a realizar un esfuerzo inversor que fomente la innovación».

Potenciales beneficiarios

Fuentes municipales añaden que casi 150 empresas de la comarca que suman 3.742 empleados podrán beneficiarse de estas ayudas, concretamente las industrias manufactureras comprendidas, según el código CNAE, entre las divisiones 10 y 30, además de los servicios de consultoría. Sobre las primeras, entre estos códigos se encuentran las metalúrgicas, el textil, el papel, las químicas, la alimentación, la madera, los productos informáticos o los vehículos a motor.

Además, la convocatoria de la Conselleria de Economia Sostenible, Sectors Productius, Comerç i Ocupació también amplía este abanico a la fabricación de muebles, la reparación de maquinaria, así como las industrias extractivas y sus empresas auxiliares.