Una manada de perros asilvestrados mantiene en jaque a vecinos y agricultores de Sagunt desde hace al menos dos años. Se trata de un grupo de animales, hasta una docena se ha llegado a contabilizar, que deambula por zonas agrarias y caminos rurales generando el pánico entre quienes las frecuentan, además de situaciones de peligro, como posibles accidentes. Las quejas se han multiplicado en las últimas semanas y la polémica ha llevado a los vecinos a dejar constancia de su malestar.
Un agricultor de Sagunt relata a Levante-EMV la situación que vivió hace unos meses. Reconoce cierto temor a acudir a su huerto por si volvía a encontrarse los perros, ya que no era la primera vez. Cuenta como son animales «muy agresivos, que plantan cara y no paran de ladrar, obligándote en muchos casos a tener que subir al coche y esperar a que se vayan». Un relato que se repite con «demasiada frecuencia en el campo», tal y como confirma el presidente desde la Asociación Valenciana de Agricultores de Sagunt (AVA-Ascosa), Francisco Campillo.
El problema, que no solo padecen agricultores sino también ciclistas, corredores y vecinos en general, lleva arrastrándose desde hace tiempo y, lejos de solucionarse, se agrava, ya que cada vez son más los perros que forman la manada y mayores las protestas y quejas ciudadanas.
Aunque, de momento, no se tiene constancia de ninguna agresión con estos canes como responsables, sí que son varios los ataques que se han producido e incluso uno de ellos a un Guardia Rural, tal y como relataba a este rotativo. «Bajé del coche y vinieron hacia mi agresivos y no tuve más remedio que coger una piedra y hacer el amago de tirársela para disuadirlos».
Torreta y Armengols
Estos animales asilvestrados no tienen un lugar fijo de estancia, aunque es más frecuente encontrarlos en el camí de la Torreta, camí de Armengols e incluso en la carretera de Canet d'En Berenguer, una de las más transitadas en la época estival, lo que suponen un constante riesgo de accidentes.
La posibilidad de provocar algún siniestro de circulación ya motivó un escrito por parte del Consell Agrari de Sagunt a la concesionaria de la autopista AP-7 hace un año, en el que se pedía que reparara las vallas de la zona de afección al suponer un coladero a la autopista para estos animales. El peligro que suponía el acceso de los perros a esta carretera generó la rápida intervención de la empresa Abertis que reparó el vallado.
Además de esta medida, desde estas mismas dependencias municipales se ha contactado con varias perreras que lograron capturar a uno de ellos, aunque el resto de compañeros sigue suelto. Una de estas empresas colocó «cestas trampa» para apresarlos en distintos puntos por donde suelen moverse, pero no obtuvieron ningún resultado. «La solución es complicada, porque sólo pasa por capturarlos y ya son varias las intentonas sin conseguirlo. Son perros salvajes demasiado listos», explican agentes rurales.
Riesgo sanitario
Además del riesgo de agresión y de posibles accidentes, el tema sanitario también es otro de los problemas que presenta esta manada. «Pueden transmitir enfermedades, están sucios, llenos de garrapatas etc.», señalan las mismas fuentes.
Este grupo de animales ha motivado también un escrito del Consell Local Agrari al departamento municipal de Sanidad poniéndole en antecedentes de lo que está ocurriendo e invitándole a actuar para poder solucionar el problema entre todos, explicaban fuentes del Consell Agrari.
